La pepsina es una enzima digestiva producida naturalmente por las células del estómago, que es responsable por la degradación de proteínas de la alimentación en péptidos, lo que facilita el proceso de digestión y la absorción de los péptidos por los intestinos.
Aparte de ser producida por el cuerpo, la pepsina también puede ser encontrada en forma de suplementos o medicamentos indicados para acelerar el proceso de digestión, reduciendo así la sensación de molestias y de abdomen hinchado.
Los suplementos o medicamentos que contienen pepsina pueden ser encontrados en farmacias convencionales o farmacias magistrales, y deben ser utilizados bajo indicación del gastroenterólogo.
Para qué sirve
La pepsina es indicada para el tratamiento de la dispepsia funcional que causa insuficiencia de la enzima pepsina y síntomas como:
- Indigestión;
- Hinchazón abdominal;
- Eructos excesivos;
- Exceso de gases intestinales;
- Dolor abdominal;
- Hinchazón abdominal después de comer.
Por lo general, la pepsina se encuentra asociada a otras sustancias, como clorhidrato de betaína, metoclopramida o dimeticona, lo que ayuda a aliviar estos síntomas.
El uso de la pepsina debe ser realizado bajo indicación del gastroenterólogo, por el tiempo de tratamiento recomendado por el médico.
¿Cuál es la función de la pepsina?
La pepsina es una enzima digestiva que forma parte del jugo gástrico y tiene como función degradar los enlaces peptídicos de las proteínas provenientes de la alimentación, formando péptidos más pequeños.
Estos péptidos posteriormente son digeridos por bacterias del intestino para ser absorbidos en forma de aminoácidos.
Cómo usar
La pepsina debe ser tomada por vía oral, con un vaso de agua, preferiblemente antes de una comida.
1. Pepsina + betaína
La pepsina + betaína es encontrada en forma de suplementos en cápsulas, en ciertas farmacias.
La dosis que suele ser recomendada en adultos es de 1 cápsula antes, durante o inmediatamente después del almuerzo o la cena.
Este suplemento debe ser utilizado bajo orientación del gastroenterólogo, principalmente porque existen distintas dosis en las cápsulas, como pepsina de 40, 60 o 100 mg + clorhidrato de betaína de 150, 300 o 600 mg, por ejemplo.
Lea también: Betaína: para qué sirve y cómo tomar tuasaude.com/es/betaina2. Pepsina + metoclopramida + dimeticona
La pepsina + metoclopramida + dimeticona es encontrada en forma de cápsulas duras con microgránulos. La dosis recomendada para adultos es 1 o 2 cápsulas antes de las comidas principales.
El uso de la pepsina de 50 mg + clorhidrato de metoclopramida de 7 mg + dimeticona de 40 mg debe ser realizado solo bajo indicación del gastroenterólogo y durante el tiempo de tratamiento indicado por el médico.
Lea también: Metoclopramida: para qué sirve y dosis tuasaude.com/es/metoclopramidaPosibles efectos secundarios
Los efectos secundarios más comunes de la pepsina son formación de ampollas en la piel o rash cutáneo, lo que se debe posiblemente a la presencia de proteínas de cerdo en la formulación.
Además, en el caso del medicamento que contiene pepsina + metoclopramida + dimeticona, también pueden surgir diarrea, estreñimiento, náuseas, vómitos, dolor abdominal, somnolencia o palpitaciones cardíacas.
La formulación que contiene metoclopramida en su composición también puede causar reacciones extrapiramidales, con síntomas como temblores, movimientos lentos del cuerpo, rigidez muscular o confusión mental. En estos casos, se debe interrumpir el uso y acudir al centro de emergencias más cercano. Vea cómo identificar los síntomas de reacción extrapiramidal.
Contraindicaciones
La pepsina no debe ser empleada por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia ni por personas que tengan úlcera estomacal o intestinal o gastritis, o que tomen antiinflamatorios no esteroideos o corticosteroides.
Asimismo, la pepsina está contraindicada en personas que tienen alergia a esta sustancia o cualquier otro componente del suplemento o medicamento.