Pitiriasis alba: qué es, síntomas y tratamiento

La pitiriasis alba es un trastorno cutáneo que provoca la aparición de manchas rosadas o rojizas en la piel, las cuales pueden desaparecer y dejar manchas blancas.

Este problema afecta principalmente a niños y jóvenes adultos con piel oscura, pero puede presentarse a cualquier edad y en personas de cualquier raza. Aunque aún no se conoce una causa específica para la aparición de esta afección, se ha determinado que no es hereditaria; por lo tanto, si hay algún caso en la familia, no significa que otros miembros deban padecerla.

El tratamiento de la pitiriasis alba debe ser indicado por un dermatólogo. Sin embargo, no siempre es necesario, ya que las manchas pueden desaparecer de forma natural en unos meses. No obstante, si hay muchas manchas o si estas no desaparecen con el tiempo, el médico puede recomendar el uso de cremas o pomadas con corticoides o inmunosupresores.

Principales síntomas

Los principales síntomas de la pitiriasis alba son:

• Manchas rojizas redondas u ovaladas que desaparecen en pocas semanas;
• Manchas más claras en la piel;
• Ampollas o placas finas en la piel de color blanquecino. Conozca otras causas de manchas blancas en la piel;
• Descamación leve de la piel;
• Comezón leve.

Por lo general, las manchas de pitiriasis alba miden de 0,5 a 5 cm de diámetro y pueden ser múltiples, de 4 a 20 manchas en la piel, apareciendo con mayor frecuencia en la cara, el cuello, los brazos o el pecho, pero también pueden afectar el cuello o la espalda, por ejemplo.

Las manchas pueden ser más fáciles de identificar durante el verano, cuando la piel está más bronceada, ya que la exposición al sol hace que la piel alrededor de la mancha clara se oscurezca, haciéndola más notoria.

Qué causa la pitiriasis alba

No existe una causa específica para la pitiriasis alba, pero se cree que surge debido a una pequeña inflamación de la piel, por lo que no es contagiosa.

Cualquier persona puede desarrollar pitiriasis aunque no tenga ningún antecedente de problemas en la piel.

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico de pitiriasis alba lo realiza el dermatólogo únicamente mediante la observación de las manchas y la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud y uso de pomadas en la piel, como ácido retinoico o corticoides, no requiriendo ningún tipo de prueba o examen más específico.

Sin embargo, el médico puede examinar las manchas con una lámpara de Wood, que es un equipo que emite luz ultravioleta, para identificar el tipo de lesión en la piel y si la mancha podría haber sido causada por otras condiciones de salud como vitiligo o infecciones fúngicas, como tiña corporis o tiña versicolor, por ejemplo.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento de la pitiriasis alba no siempre es necesario, debido a que las manchas suelen desaparecer por si solas con el tiempo, lo que puede demorar algunos meses a años.

Sin embargo, en caso las machas no desaparezcan, sean extensas o causen malestar estético, el dermatólogo puede indicar el tratamiento con:

• Pomadas con corticoides, como la hidrocortisona, para reducir la inflamación y aliviar el enrojecimiento y la comezón, además de acelerar la pigmentación de la piel;
• Crema hidratante que contenga vaselina, para aliviar la resequedad o la descamación de la piel;
• Cremas que contengan inmunosupresores, como tacrolimo o pimecrolimo;
• Fototerapia con psoraleno (PUVA), en los casos de muchas lesiones en la piel.

Además, también es recomendable aplicar protector solar, con SPF 30 o superior, sobre la piel afectada siempre que sea necesario exponerse al sol o incluso en días nublados, para prevenir las quemaduras solares y evitar el oscurecimiento de la piel alrededor de las manchas.