Podofilina: para qué sirve y cómo usar la crema (y la solución)

La podofilina es un medicamento utilizado en el tratamiento de las verrugas genitales o perianales causadas por el virus del VPH. Contiene la sustancia activa podofilotoxina, que se extrae de las plantas Podophyllum emodi y Podophyllum peltatum, y que actúa reduciendo la multiplicación del virus y eliminando las células infectadas.

Este medicamento se aplica de manera tópica y se encuentra disponible en forma de pomada o solución. Sin embargo, debe utilizarse con precaución debido a su alta capacidad de irritar los tejidos sanos.

La podofilina debe ser usada únicamente bajo la indicación de un ginecólogo, en el caso de las mujeres, o de un urólogo, en el caso de los hombres, y siempre siguiendo las recomendaciones médicas. Está contraindicada durante el embarazo y la lactancia.

Imagem ilustrativa número 1

Para qué sirve

La podofilina es un medicamento que sirve principalmente para el tratamiento de verrugas perianales o genitales, tanto en mujeres como en hombres, causadas por el virus del VPH, conocidas como condiloma acuminado.

Este medicamento posee propiedades citotóxicas y antimitóticas, lo que significa que previene la proliferación celular y favorece la destrucción de células anormales, como las infectadas por el virus del VPH.

Aunque la podofilina elimina las verrugas genitales y anales, no puede erradicar el virus ni curar el VPH. Por lo tanto, es fundamental realizar un seguimiento regular con un ginecólogo o urólogo para identificar y tratar las verrugas de manera adecuada.

Cómo usar

La podofilina se usa dependiendo de la presentación que sea indicada por el médico, como se indica a continuación:

1. Crema de podofilina

La podofilina en crema (1,5 mg/g) debe aplicarse únicamente sobre la verruga a tratar, siguiendo siempre la orientación médica. Es fundamental lavar y secar bien la zona antes de la aplicación. La pomada se puede aplicar usando un cotonete o hisopo.

En general, el médico puede indicar el uso de la pomada dos veces al día (cada 12 horas) durante 3 días, seguido de un descanso de 4 días, completando así un ciclo de tratamiento.

Si las verrugas persisten, es posible que sea necesario repetir el tratamiento después de 7 días desde el inicio del ciclo, hasta un máximo de 4 ciclos seguidos, es decir, durante 4 semanas.

2. Solución de podofilina

La solución de podofilina al 10% o 25% debe aplicarse cuidadosamente sobre las verrugas, colocándola dos veces al día, por la mañana y por la noche, durante 3 días consecutivos, seguidos de 4 días sin tratamiento. Es importante dejar que la solución se seque al aire libre.

Es posible realizar nuevos ciclos de tratamiento, aplicando la solución dos veces al día durante tres días, seguidos de 4 días sin tratamiento, durante un total de 4 semanas, si fuera necesario.

En algunos países, la aplicación de la solución puede ser realizada exclusivamente por el ginecólogo o el urólogo en el consultorio médico porque es más concentrada.

Cuidados durante el tratamiento

Algunos cuidados importantes antes de usar la podofilina son:

  • Lavar la zona a tratar con agua y jabón antes de aplicar la podofilina;
  • Aplicar la pomada o la solución solo en las verrugas;
  • Lavar bien las manos después de la aplicación;
  • Evitar el contacto íntimo durante el tratamiento; si ocurre, utilizar preservativo;
  • Es importante evitar fumar o acercarse al fuego, si es usada la solución de podofilina, por ser inflamable;
  • No pasar la pomada o la solución sobre regiones de la piel saludables.

Además, el uso de la podofilina no debe realizarse durante el período menstrual, ya que puede afectar la respuesta al tratamiento, dado que el flujo menstrual puede "eliminar" la pomada de la zona.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes de la podofilina y de la podofilotoxina son la irritación en el lugar de aplicación, que puede ocurrir en el segundo o tercer día de uso, y normalmente está relacionada con la necrosis de la verruga, es decir, la muerte de las células de la verruga, mejorando gradualmente al finalizar el tratamiento.

Además, pueden aparecer un aumento de la sensibilidad de la piel, picazón, ardor, enrojecimiento o úlceras superficiales. En hombres, también puede presentarse balanopostitis. Vea cómo identificar los síntomas de balanopostitis.

Cuando la podofilina se aplica en áreas sanas de la piel, puede haber sensación de quemazón en la zona de aplicación, picazón, sangrado o inflamación.

Los efectos secundarios sistémicos son poco frecuentes, ya que este medicamento actúa localmente. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar dolor de cabeza, náuseas, diarrea, alteraciones renales, desorientación o confusión mental, por lo que es importante informar al médico sobre estos efectos adversos.

Contraindicaciones

La podofilina no debe usarse en bebés, niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia. Tampoco se recomienda en personas alérgicas a los componentes del medicamento.

Tanto la pomada como la solución no deben aplicarse para tratar heridas abiertas o sangrantes.