La polipectomía es una cirugía realizada mediante endoscopia, indicada para la remoción de pólipos, además de facilitar la identificación de lesiones malignas o premalignas en los órganos afectados.
Este procedimiento suele realizarse durante exámenes endoscópicos como la colonoscopia o la endoscopia digestiva alta. Según la ubicación de los pólipos, puede denominarse polipectomía gástrica, de colon o uterina, entre otras.
Tras la extracción de los pólipos, es fundamental seguir las indicaciones médicas. En caso de dudas, se recomienda consultar a un médico general. En algunos casos, la recuperación puede prolongarse hasta dos semanas.
Cuándo está indicada
La polipectomía suele indicarse para el tratamiento de diferentes tipos de pólipos, como los gástricos, intestinales o uterinos. Al ser un procedimiento menos invasivo, ayuda a prevenir posibles complicaciones asociadas con otras opciones de tratamiento.
Además, la polipectomía también se utiliza para la biopsia del pólipo, lo que permite la detección temprana de lesiones malignas o premalignas. Una vez extraído, el pólipo puede ser enviado al laboratorio para un análisis más detallado.
Preparación para la polipectomía
La preparación para la polipectomía varía según el tipo que se vaya a realizar. Especialmente en el caso de la polipectomía de colon, puede incluir una dieta líquida en los días previos, así como el uso de laxantes en las últimas 24 horas, siguiendo las indicaciones del médico. Vea cómo hacer una dieta líquida.
El médico también puede recomendar la suspensión temporal de medicamentos antiinflamatorios, aspirina o anticoagulantes, ya que estos fármacos pueden aumentar el riesgo de sangrado durante la polipectomía.
Cómo se realiza
La polipectomía se realiza generalmente con el paciente sedado o bajo anestesia general durante exámenes endoscópicos, como la endoscopia digestiva alta, colonoscopia o histeroscopia, o, en algunos casos, mediante una laparoscopia, que es una cirugía menos invasiva.
Se utiliza un dispositivo flexible en forma de tubo fino con una cámara en la punta, que se introduce en el cuerpo a través de un orificio. Este aparato no solo permite la visualización del pólipo, sino también la utilización de instrumentos como el electrocauterio para su extracción.
Durante el procedimiento, la persona no suele sentir dolor. Al finalizar, es común que sea monitorizada durante algunas horas antes de ser dada de alta. Debido a la sedación, se recomienda que el paciente esté acompañado por alguien que lo asista después de la intervención
Lea también: Laparoscopia: qué es, para qué sirve y cómo se realiza tuasaude.com/es/laparoscopiaTipos de polipectomía
El tipo de polipectomía varía según la ubicación del pólipo:
1. Polipectomía de colon
Cuando se detectan pólipos intestinales, puede recomendarse la polipectomía de colon, que generalmente se realiza durante una colonoscopia. Este examen se utiliza para evaluar la salud del intestino, pero también permite tratar algunas condiciones de salud. Conozca más sobre qué es la colonoscopia y para qué se utiliza.
2. Polipectomía gástrica
La polipectomía gástrica es una opción de tratamiento para los pólipos que aparecen en el estómago, especialmente cuando son pequeños. Normalmente, se realiza mediante una endoscopia digestiva alta. Vea cuándo está indicada la endoscopia y cómo se realiza.
3. Polipectomía uterina
La extracción de pólipos uterinos puede llevarse a cabo durante una histeroscopia en algunos casos, lo que se conoce como polipectomía histeroscópica. Esta es una de las principales formas de tratamiento para los pólipos endometriales. Vea cómo se realiza la extracción de pólipos uterinos.
Cómo es la recuperación
La recuperación y los cuidados después de la extracción de pólipos varían según el tipo de polipectomía, por lo que es fundamental seguir correctamente las indicaciones del médico. En el caso de la polipectomía de colon, la recuperación puede durar aproximadamente dos semanas.
Durante los primeros días tras la polipectomía, es normal observar pequeñas manchas de sangre al realizar la higiene después de evacuar o sentir algún malestar abdominal, lo cual no se considera problemático.
Los cuidados posteriores suelen incluir evitar esfuerzos físicos intensos o levantar peso durante el periodo de recuperación. En caso de pólipos intestinales, es recomendable mantener una dieta ligera en los primeros días.
Lea también: Pólipos en colon: qué son, principales síntomas y tratamiento tuasaude.com/es/polipos-intestinalesPosibles complicaciones
Algunas posibles complicaciones de la polipectomía son:
- No lograr remover completamente el pólipo;
- Sangrado en el lugar de la extracción del pólipo;
- Aparición de síntomas como dolor o malestar después del procedimiento, conocidos como síndrome pospolipectomía;
- Perforación del órgano, aunque este riesgo suele ser bajo.
En particular, si tras la polipectomía se presentan síntomas como dolor, malestar, sangrado abundante o hinchazón abdominal, se recomienda consultar al médico responsable para una evaluación que descarte posibles complicaciones más graves.