Pompoarismo: qué es, beneficios y ejercicios

Evidencia científica

El pompoarismo, pompoir o beso de singapur es una técnica que sirve para mejorar y aumentar el placer sexual durante el contacto íntimo tanto en las mujeres como en los hombres, a través de la contracción y relajación de los músculos del piso pélvico.

Asimismo, la realización de estos ejercicios también aportan otros beneficios para la salud, pues al fortalecer los músculos del piso pélvico, ayudan a prevenir y combatir la incontinencia urinaria, la disfunción eréctil y la incontinencia fecal.

Esta técnica del pompoarismo permite que sea posible masajear y presionar el órgano sexual masculino con los músculos de la vagina durante el contacto íntimo, mientras que en el hombre mejora la resistencia y el desempeño sexual. Vea en qué consisten los ejercicios de kegel

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Beneficios del pompoarismo en mujeres

Los beneficios del pompoarismo en las mujeres son:

  • Mayor placer sexual, ya que las contracciones realizadas durante las relaciones sexuales aumentan la estimulación sexual;
  • Mejoría en los resultados sexuales, ya que la técnica fortalece los músculos del piso pélvico;
  • Ayuda a tratar y prevenir la incontinencia urinaria y la incontinencia fecal.

Además, también ayudan a fortalecer los músculos que soportan el útero y el peso de la barriga durante el embarazo, ayudando a controlar la musculatura pélvica para el parto y facilitar la salida del bebé.

Cómo se realizan los ejercicios

Para practicar ejercicios de pompoarismo es posible realizar ejercicios simples de contracción y relajación sin accesorios, o recurrir a la utilización de accesorios como el benwa, también conocido como bolas tailandesas.

Ejercicios para contraer el perineo

Estos ejercicios son muy simples de practicar, basta con seguir estos pasos:

  1. Acostarse o sentarse en un lugar tranquilo y cómodo, comenzar a respirar lenta y profundamente durante algunos segundos;
  2. Contraer fuertemente la musculatura del piso pélvico, manteniendo la contracción durante 2 segundos. La contracción puede sentirse cerrando el ano y la vagina, si no consigue identificar cuáles son los músculos, cuando vaya a orinar suelte un poco de orina y luego detenga el chorro, estos son los músculos que debe trabajar;
  3. Al cabo de 2 segundos, se deben relajar los músculos y descansar durante 8 segundos.
  4. Los pasos 2 y 3 deben repetirse entre 8 a 10 veces consecutivas, por lo que se recomienda realizar una última contracción que dure entre 8 a 10 segundos seguidos.

Estos ejercicios se deben realizar diariamente para fortalecer todos los músculos del piso pélvico y se deben realizar algunas veces con las piernas juntas y otras veces con las piernas abiertas.

Durante la realización de los ejercicios, es muy importante que la mujer se asegure que no está contrayendo los músculos del abdomen, ya que esto suele suceder en mujeres con la musculatura del piso pélvico débil.

Ejercicios con bolitas tailandesas

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Bolas tailandesas

Para realizar los ejercicios de fortalecimiento usando las bolitas tailandesas o benwa, es necesario seguir los pasos a continuación:

  1. Insertar una bolita en la vagina e intentar succionar las otras bolitas siguientes usando siempre que sea posible sólo la fuerza de la contracción de la musculatura de la vagina;
  2. Después de introducir las bolitas, debe comenzar el proceso de expulsión, extrayendo las bolitas de la vagina una a una, debiendo relajar la musculatura del piso pélvico;

Es importante realizar estos ejercicios a diario, de forma que las bolitas puedan ser insertadas y expulsadas sólo con los movimientos de la musculatura del piso pélvico. Además, estas bolitas también pueden ayudar a desarrollar la sensibilidad vaginal, especialmente si se utilizan durante el día o incluso en una caminata, ya que están compuestas de diminutas bolitas de plomo que vibran con el movimiento corporal.

Lea también: Pedos vaginales: qué son, por qué ocurren y cómo evitarlos tuasaude.com/es/gases-vaginales

Beneficios del pompoarismo en hombres

Los principales beneficios del pompoarismo masculino son:

  • Mejorar el control de la vejiga y el intestino;
  • Combatir la pérdida involuntaria de orina;
  • Ayudar a vaciar completamente la vejiga al orinar;
  • Combatir la eyaculación precoz;
  • Aumentar la presión arterial dentro del pene, mejorando la erección;
  • Combatir la disfunción eréctil;
  • Aumentar el tiempo de eyaculación;
  • Mejorar la salud de la próstata;
  • Mejorar el control de las heces;
  • Aumentar la sensibilidad de la región íntima;
  • Mejorar las relaciones sexuales.

El pompoarismo masculino mejora la tensión del músculo pubococcígeo, eleva los testículos, fortalece también el músculo cremaster y el esfínter anal, aumentando la sensibilidad de la región genital y la autoestima.

Cómo hacer los ejercicios

Para hacer los ejercicios de pompoarismo masculino, inicialmente se debe:

  1. Identificar los músculos del suelo pélvico, lo que se puede hacer interrumpiendo el chorro de orina o contrayendo el esfínter anal, como para evitar la liberación de gases intestinales;
  2. Contraer los músculos del suelo pélvico durante 3 a 5 segundos;
  3. Relajar los músculos del suelo pélvico durante unos 3 a 5 segundos;
  4. Realizar 10 contracciones y relajaciones seguidas de los músculos del suelo pélvico;
  5. Reanude el ejercicio, haciendo al menos de 8 a 10 series de 10 contracciones/relajaciones todos los días.

La contracción se debe realizar con fuerza, pero inicialmente lo normal es que dure alrededor de 1 segundo, pero con la práctica se puede mantener la contracción por más tiempo.

Los ejercicios de Kegel se deben realizar al menos de 3 a 5 veces al día, todos los días, y la cantidad de contracciones requeridas es de 50 en total. Una vez que se aprenda a contraer el músculo correctamente, es posible hacer las contracciones en cualquier lugar, ya sea sentado, acostado o de pie. Al principio, es más fácil comenzar los ejercicios de Kegel acostado de lado.

Cuándo se pueden ver los resultados

Los resultados del pompoarismo masculino se pueden ver en el primer mes, pero cuando el objetivo es tratar la incontinencia urinaria, el resultado final puede tardar de 3 meses a 1 año en notarse y en ocasiones puede ser necesario realizar otros procedimientos fisioterapéuticos.

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