El prolapso rectal es cuando la parte interna del recto sale por el ano y se hace visible fuera del cuerpo, provocando síntomas como dolor abdominal, ardor en la zona anal, dificultad para defecar y sensación de pesadez en el ano.
El prolapso rectal puede ser consecuencia del debilitamiento del músculo anal debido al envejecimiento, esfuerzo excesivo para evacuar, estreñimiento o como consecuencia de la infección por parásitos intestinales, por ejemplo.
Es importante consultar al proctólogo para que realice una evaluación e indique el tratamiento más adecuado, el cual puede incluir la compresión de los glúteos, reintroducción manual por el médico o cirugía, de acuerdo a la gravedad del prolapso.
Síntomas de prolapso rectal
Los principales síntomas de prolapso rectal son:
- Presencia de tejido rojo oscuro, húmedo y en forma de tubo fuera del ano;
- Dolor abdominal;
- Sensación de una masa en el ano;
- Ardor, sangrado, malestar y sensación de peso en el ano;
- Dificultad para defecar;
- Sensación de evacuación incompleta.
Ante la presencia de síntomas que posiblemente indiquen prolapso rectal, es importante consultar al proctólogo o gastroenterólogo para que realice una evaluación.
Se debe recordar que el prolapso rectal no debe ser confundido con hemorroides. En caso de prolapso rectal, la parte final del intestino puede observarse fuera del cuerpo por el ano, mientras que las hemorroides surgen cuando las venas del intestino dilatan y salen. Conozca más sobre cómo saber si son hemorroides y qué hacer.
Tipos de prolapso retal
De acuerdo a las características, el prolapso rectal puede clasificarse en dos tipos:
- Prolapso rectal parcial: cuando sólo la capa del revestimiento mucoso del intestino queda expuesta, y en estos casos el prolapso puede ser difícil de visualizar;
- Prolapso rectal total: cuando todas las capas salen a través del ano, mostrando gran parte del recto fuera del cuerpo.
Es importante que el tipo de prolapso rectal sea diagnosticado para que el médico pueda indicar el tratamiento más adecuado, promoviendo el alivio de los síntomas.
Cómo se realiza el diagnóstico
Para confirmar el diagnóstico de prolapso rectal, el proctólogo o gastroenterólogo realiza el examen por medio del cual se observa el prolapso en el orificio anal.
En algunos casos, exámenes como colonoscopia, sigmoidoscopia o radiografías con contraste pueden ser solicitadas para facilitar la confirmación y observar la extensión del problema.
Principales causas
El prolapso rectal es más común en personas a partir de los 60 años debido al envejecimiento y pérdida de la fuerza muscular de la zona. En niños menores de 3 años, el prolapso rectal suele presentarse debido a la debilidad de los músculos y ligamentos que sostienen el intestino.
Sin embargo, otras posibles causas del prolapso rectal son:
- Estreñimiento;
- Esfuerzo intenso para evacuar;
- Debilidad del músculo del ano;
- Infección intestinal por el parásito Trichuris trichiura;
- Malformaciones del intestino;
- Pérdida de peso excesiva.
Además de esto, el prolapso puede surgir siempre que haya una alteración de la anatomía de la región por una cirugía, parto, alguna lesión o por enfermedades como aumento de la próstata o malformación del intestino.
Prolapso Rectal infantil
El prolapso rectal infantil es frecuente en niños de hasta 3 años de edad, debido al hecho de que los músculos y ligamentos que sostienen al recto están en formación y aún no están fuertemente fijos a la pared abdominal, siendo que, cuando el niño tiene diarreas frecuentes, la pared del recto prolapsa y protruye.
En este caso, el tratamiento para el prolapso rectal en niño, consiste en apenas reintroducir el recto, pues como el crecimiento del niño, el recto se irá fijando adecuadamente en la pared, Además de esto, puede estar asociado a infecciones o al déficit de absorción de nutrientes y al estreñimiento constante. Vea más sobre los síntomas y tratamiento de este tipo de prolapso.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento para el prolapso rectal incluye la compresión de las nalgas para intentar reintroducir el recto hacia dentro del ano, en caso de que sea necesario, este procedimiento manual para introducir el recto es llevada a cabo por el proctólogo.
En los casos en que el prolapso rectal sea causado por estreñimiento, el tratamiento también incluye medicamentos laxantes, disminución del esfuerzo para evacuar, aumento de la ingesta de alimentos ricos en fibras y la ingesta de cerca de 2 litros de agua por día, esto con la finalidad de recudir el esfuerzo al evacuar e intentar que le problema no vuelva a ocurrir.
La cirugía para prolapso rectal también es una opción, pero está indicada sólo como último recurso y en caso de prolapso rectal frecuente. Siendo que en la cirugía, parte del recto puede ser retirado o fijado al hueso sacro o ser extraído una parte del mismo para que no haya más este problema.
¿El prolapso rectal tiene cura?
El prolapso rectal tiene cura y su tratamiento incluye la regularización del funcionamiento del intestino y la reintroducción del recto hacia adentro del ano por medio de cirugía. En niños, es común que haya mejoría espontánea con el crecimiento, siendo recomendado mantener orientación por un pediatra o proctólogo.