La prótesis de rodilla es un dispositivo de metal, cerámica o plástico diseñado para reemplazar una rodilla dañada. El reemplazo puede ser parcial o total y se utiliza cuando el cartílago articular está dañado, como en casos de artritis, artrosis o traumatismos.
Esta cirugía se indica cuando algunos de los 3 compartimentos de la articulación de la rodilla, o incluso los 3 presentan alteraciones severas, y el objetivo de la misma es disminuir el dolor intenso y devolverle funcionalidad a la rodilla.
La cirugía de reemplazo de rodilla generalmente se indica cuando hay un daño grave en la articulación o cuando no se logran mejoras con medicamentos y fisioterapia. Se recomienda realizar fisioterapia tanto antes como después de la cirugía para prevenir posibles complicaciones, como el aflojamiento de la prótesis y la rigidez articular.
![protesis de rodilla](https://image.tuasaude.com/media/article/kz/ht/protesis-de-rodilla_70589.jpg?width=686&height=487)
Tipos de prótesis de rodilla
Existen dos tipos de prótesis de rodillas y ellas son:
1. Prótesis parcial de rodilla
La prótesis parcial de rodilla se utiliza en personas cuyo desgaste articular afecta solo a un compartimento de la rodilla, generalmente el medial o lateral, permitiendo conservar las estructuras sanas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta cirugía no previene el deterioro en los otros dos compartimentos, lo que podría llevar a la necesidad de un reemplazo total en el futuro.
2. Prótesis total de rodilla
La prótesis total de rodilla se recomienda cuando el desgaste articular compromete los tres compartimentos de la rodilla (medial, lateral y femoropatelar), siendo necesaria la sustitución completa de la articulación para recuperar la funcionalidad y aliviar el dolor.
Cómo se realiza la operación
La cirugía de prótesis de rodilla consiste en reemplazar los cartílagos articulares desgastados por dispositivos metálicos, cerámicos o plásticos, devolviendo a la persona una articulación funcional, alineada e indolora.
Los pasos para colocar la prótesis de rodilla son:
- Administración de anestesia, que puede ser general o, en algunos casos, local, con el uso de sedantes, para que en ningún momento la persona sienta dolor;
- corte del extremo del hueso para preparar la superficie que recibirá la pieza protésica;
- fijación de la prótesis, las piezas protésicas cuentan con un palito (vástago o tallo), que se introduce en el interior del hueso para asegurar una mejor fijación. Este tallo puede adherirse al hueso mediante un cemento especial o a través de tornillos;
- cierre de la incisión con suturas, reparando los músculos y la piel.
La cirugía tiene una duración aproximada de 2 horas, y se recomienda que la persona permanezca en cama durante las primeras 12 horas posteriores al procedimiento.
El tiempo de hospitalización es de 3 a 4 días y la fisioterapia podrá ser iniciada al día siguiente de la cirugía.
Generalmente, el médico prescribe analgésicos y antiinflamatorios para los primeros días. Después, la persona deberá regresar al hospital entre 12 y 14 días posteriores a la cirugía para retirar los puntos.
¿Cuánto tiempo dura la prótesis?
Las prótesis de rodilla suelen durar entre 15 y 20 años, aunque factores como infecciones, aflojamiento, inestabilidad o fracturas pueden requerir su reemplazo antes de ese tiempo.
El cuidado adecuado, la actividad física moderada y los chequeos regulares son clave para maximizar su durabilidad.
Recuperación postoperatoria
La recuperación luego de la artroplastia de rodilla puede variar de 3 a 6 semanas. Dependiendo del caso, la persona podrá mover la rodilla 2 a 3 días después de la cirugía.
Podrá comenzar a caminar al momento de recuperar el control muscular, generalmente orientado por un fisioterapeuta y con la ayuda de un andador en los primeros días.
¿Qué no debo hacer luego de la cirugía?
Es importante evitar ejercicios de alto impacto o aquellos que requieran una flexión excesiva de la rodilla, como la posición de cuclillas. También se deben evitar movimientos bruscos que puedan comprometer la estabilidad de la prótesis y afectar la recuperación.
Es posible retomar gradualmente la mayoría de las actividades diarias, pero es fundamental no apresurarse para evitar posibles complicaciones.
Posibles complicaciones
Las posibles complicaciones de la prótesis de rodilla son:
- Infecciones;
- inestabilidad;
- fracturas periprotésicas;
- rigidez articular;
- aflojamiento protésico.
La prótesis de rodilla mejora el dolor y el desgaste articular, permitiendo a muchas personas retomen sus actividades cotidianas. Sin embargo, en algunos casos, el dolor no desaparece por completo.
Fisioterapia pre y postoperatoria
La fisioterapia es importante realizarla antes y después de la cirugía de prótesis de rodilla. En el preoperatorio el objetivo es fortalecer los músculos, dado que luego de la cirugía van a atrofiarse por la inmovilidad y consecuentemente van a perder fuerza.
Los objetivos de la fisioterapia postoperatoria son aliviar el dolor, reducir la inflamación, mejorar los movimientos de la rodilla y fortalecer los músculos. El programa debe ser indicado por un fisioterapeuta y además de ejercicios podrá aplicarse TENS, masajes de la cicatriz y crioterapia.
Los ejercicios que la persona puede realizar en casa son:
- Extensión pasiva de la rodilla en posición sentada o acostada, colocando una pequeña altura debajo del tobillo para que este quede por encima de la altura de la rodilla;
- contracción de muslos/cuádriceps, colocando una toalla enrollada por debajo de la rodilla y presionando la misma hacia abajo;
- movilidad de tobillo hacia arriba y hacia abajo;
- flexión y extensión de rodilla.
Es fundamental que realice ejercicios en casa, dado que la falta de movimiento genera rigidez.
Luego de la cirugía es importante evitar caídas, realizar caminatas leves y ejercicios físicos regulares para mantener la fuerza y movilidad de la rodilla; que deben ser realizados en la clínica de fisioterapia o en el gimnasio bajo la orientación del entrenador.
Vea algunos consejos sobre cómo aliviar el dolor de la rodilla en el vídeo a continuación: