La prueba del VIH se realiza con el objetivo de detectar la presencia del virus del VIH en el organismo, debiendo realizarse por lo menos 30 días después de la exposición a situaciones de riesgo como relaciones sexuales sin protección o haber entrado en contacto con la sangre o secreciones de personas portadoras del virus de VIH.
La prueba de VIH es simple y se realiza principalmente a través del análisis de una muestra de sangre, pero también se puede utilizar la saliva para verificar la presencia del virus en el organismo. Todas las pruebas de VIH evalúan la presencia de anticuerpos producidos por el cuerpo contra los 2 tipos de virus existentes, el VIH 1 y el VIH 2.
A partir del resultado de la prueba, el médico puede indicar la realización de pruebas más específicas para confirmar la infección y verificar la carga viral en el organismo y, de esta forma, sea posible iniciar el tratamiento más adecuado para evitar el desarrollo de SIDA.
Cuándo es indicado
La prueba del VIH debe realizarse al menos 1 mes después de un comportamiento de riesgo, ya que la ventana inmunológica, que es el tiempo entre el contacto con el virus VIH y la posibilidad de detectar el virus en el cuerpo, es de aproximadamente 30 días.
Si la prueba se realiza antes de los 30 días de la ventana inmunológica, existe la posibilidad de obtener un resultado falso negativo. En estos casos, se recomienda repetir la prueba después del período de la ventana inmunológica.
Aunque se considera que la ventana inmunológica del VIH es de 30 días, es posible que este tiempo varíe según el sistema inmunológico de la persona, de manera que antes de este período la persona ya pueda presentar una cantidad suficiente de virus en la circulación capaz de estimular una respuesta inmunológica y ser identificada en la prueba de sangre.
Tipos de test de HIV
Existen diferentes tipos de pruebas de VIH que pueden permitir obtener resultados antes de los 30 días de la ventana inmunológica, siendo las principales:
- Prueba rápida de antígeno/anticuerpo: se realiza con una muestra de sangre obtenida de la punta del dedo y puede detectar el VIH entre 18 y 90 días después de la exposición al virus. Conozca cómo se realiza la prueba rápida de VIH;
- Prueba ELISA de antígeno/anticuerpo de 4ª generación: se realiza extrayendo una muestra de sangre para ser evaluada en un laboratorio y puede detectar el VIH entre 18 y 45 días después de la exposición al virus;
- Prueba de ácido nucleico (NAT) o examen molecular: también se realiza en un laboratorio con una muestra de sangre y es capaz de detectar la presencia de ARN del VIH aproximadamente entre 10 y 33 días después de la exposición al virus.
Si el médico recomienda realizar un examen molecular con el fin de identificar el virus en la corriente sanguínea, se sugiere que la recolección de sangre se realice preferiblemente en la tercera semana de infección, ya que durante este período es posible observar una mayor concentración del virus en la sangre.
Después de este período, el virus ya se encuentra dentro de las células, lo que dificulta su identificación, por lo que se recomienda realizar la prueba de anticuerpos.
Cómo interpretar los resultados
El resultado de la prueba de VIH debe ser interpretado por el médico considerando el tipo de prueba realizada, el comportamiento de riesgo de la persona y la fecha en que ocurrió.
Examen de sangre de VIH
El examen de sangre para el VIH se realiza con el objetivo de identificar la presencia del virus y su concentración en la sangre, dando información sobre la etapa en que se encuentra la infección. La prueba de VIH se puede realizar a través de varios métodos de laboratorio de diagnóstico, siendo el más utilizado el método de ELISA. Los posibles resultados son:
- Mayor de 5,00 - Resultado positivo o Reactivo: significa que la persona estuvo en contacto y se contagió con el virus del VIH;
- Menor de 1,00 - Resultado negativo o No Reactivo: significa que la persona no está contagiada con el virus del VIH;
- Entre 1,00 y 5,00 - Resultado indeterminado: es necesario repetir la prueba porque la muestra no fue lo suficientemente clara. Algunas situaciones que pueden causar este tipo de resultado son el embarazo o haberse vacunado recientemente.
En caso de que el resultado sea positivo para VIH el propio laboratorio utiliza otros métodos para confirmar la presencia del virus en el organismo siendo este un resultado confiable.
Algunos laboratorios también indican un valor cuantitativo en el examen de VIH, además del resultado reactivo, no reactivo o indeterminado. Sin embargo, este valor es solo de interés médico. En caso de que a nivel clínico el médico considere que es un valor importante, podrá solicitar la realización de exámenes más específicos como el examen de carga viral, donde se cuantifica en qué cantidad se encuentra el virus en la sangre.
La prueba debe hacerse 30 días después del comportamiento de riesgo y, en caso de que el resultado sea indeterminado o no reactivo, se recomienda que el examen se repita después de 60 días para verificar la presencia o ausencia del virus. Es importante repetir el examen aunque no hayan síntomas asociados como pérdida rápida de peso, fiebre, tos persistente, dolor de cabeza y aparición de manchas rojas o pequeñas heridas en la piel. Conozca los principales síntomas del VIH.
Pruebas rápidas de VIH
Los resultados de las pruebas rápidas que utilizan una pequeña muestra de saliva o una gota de sangre para identificar el virus del VIH muestran el resultado en 15 o 30 minutos, también son de confianza. Siendo los posibles resultados:
- Positivo: Indica que la persona posee el virus del VIH pero debe realizarse el examen de sangre ELISA para confirmar el resultado;
- Negativo: Indica que la persona no está contagiada con el virus del VIH.
Las pruebas rápidas se utilizan en la calle, en campañas gubernamentales en los centros de pruebas y asesoramiento (CTA) y en mujeres embarazadas que comienzan el trabajo de parto sin haber realizado el seguimiento prenatal.
Qué hacer hasta obtener el resultado
En caso de que una persona haya estado expuesta al virus del VIH, se debe acudir a un centro de salud u hospital para realizar la prueba rápida de VIH e iniciar la profilaxis post exposición (PEP), la cual ayuda a prevenir la multiplicación del virus del VIH y el desarrollo de la infección.
La PEP debe comenzar en un plazo máximo de 72 horas después de la presunta exposición al virus del VIH, preferiblemente en las primeras dos horas.
Examen de carga viral
El examen de carga viral tiene como objetivo monitorear la progresión de la enfermedad y verificar la eficacia del tratamiento mediante la medición de la cantidad de copias del virus presentes en la sangre en el momento de la recolección.
Este examen es costoso ya que se realiza mediante técnicas moleculares que requieren equipos y reactivos especiales, por lo que no se solicita con fines diagnósticos. Por lo tanto, el examen de carga viral solo se realiza cuando hay un diagnóstico de infección por VIH con el propósito de monitorear y seguir al paciente, siendo solicitado por el médico de 2 a 8 semanas después del diagnóstico o inicio del tratamiento, y se repite cada 3 meses.
De forma general, el resultado o valores normales de carga viral son:
- Entre 100,000 y 1 millón de copias: indica un resultado alto, habiendo riesgo de contagiar el virus;
- Debajo de 10,000 copias: se consideran valores estables y menor riesgo para desarrollar SIDA;
- Debajo de 50 copias: se considera "indetectable", es decir, el virus está en muy bajas concentraciones en la sangre, lo que indica que el tratamiento está siendo efectivo, pudiendo variar de acuerdo al laboratorio.
Un resultado de carga viral indeterminado no significa que la infección haya desaparecido, sino que el virus se encuentra en bajas concentraciones en la sangre, lo que indica que el tratamiento está siendo efectivo. Existe consenso en la comunidad científica de que cuando la carga viral es indetectable, el riesgo de transmisión del virus por vía sexual es bajo, sin embargo, es importante utilizar preservativo durante las relaciones sexuales.
A partir del resultado del examen, el médico puede evaluar el número de copias del virus en la sangre y compararlo con resultados anteriores, verificando así la eficacia del tratamiento. Un aumento en la carga viral indica un empeoramiento de la infección y posiblemente resistencia al tratamiento, por lo que el médico deberá cambiar la estrategia terapéutica. Por otro lado, una disminución en la carga viral a lo largo del tiempo indica que el tratamiento está siendo efectivo y que se está inhibiendo la replicación del virus."
Cuándo el resultado puede ser un falso negativo
Un resultado falso negativo puede ocurrir cuando la persona se realiza la prueba en un plazo de hasta 30 días después de una conducta de riesgo, como relaciones sexuales sin protección, compartir agujas y jeringas desechables, o exposición a objetos cortantes contaminados como cuchillos o tijeras, por ejemplo. Esto sucede porque el organismo no puede producir suficientes anticuerpos para que la presencia del virus sea detectada en la prueba.
Sin embargo, incluso si la prueba se realiza 1 mes después de la conducta de riesgo, el organismo puede tardar hasta 3 meses en producir suficientes anticuerpos contra el virus del VIH y que el resultado sea positivo. Por lo tanto, es importante repetir la prueba entre los 90 y 120 días posteriores a la conducta de riesgo para confirmar la presencia o ausencia del virus del VIH en el organismo.