La pubertad es el período de la vida en el que ocurre cambios fisiológicos y biológicos en el cuerpo humano que marca la transición de la niñez a la adolescencia. Las modificaciones comienzan a ser evidentes a partir de los 12 años, pero pueden variar según los antecedentes familiares y los hábitos alimentarios del niño, por ejemplo.
Además de los cambios físicos evidentes en este período, la persona puede tener grandes variaciones de humor debido al aumento de la producción de hormonas, como la testosterona, en el caso de los niños, y de estrógeno, en el caso de las niñas.
En caso de que los cambios no sean observados o no ocurran hasta los 13 años de edad, está indicado consultar un médico para que se pueda investigar la causa y el tratamiento sea iniciado, el cual normalmente es llevado a cabo mediante reposición hormonal. Conozca sobre la testosterona y sus valores normales.
Principales características y cambios corporales
La edad en la que surgen los primeros signos del inicio de la pubertad puede variar entre niños y niñas, pudiendo ocurrir en niñas entre los 8 y 13 años, y en niños entre los 9 y 14 años.
Cambios corporales en las niñas
Los principales cambios corporales que suceden en la pubertad de las niñas son:
- Crecimiento de los senos;
- Surgimiento de vello púbico y en las axilas;
- Cintura más estrecha;
- Desarrollo de los órganos sexuales;
- Aumento de tamaño del útero;
- Aumento de la oleosidad de la piel, siendo notado el aparecimiento del acné. Vea más sobre los cambios corporales en las mujeres durante la pubertad.
En las niñas, el signo más evidente del inicio de la pubertad es la menarca, que es la primera menstruación, la cual suele ocurrir entre los 12 y 13 años; no obstante, puede variar de acuerdo con el estilo de vida y los antecedentes de las mujeres de la familia. Conozca qué es la menarca y sus principales síntomas.
Cambios corporales en los niños
Los principales cambios corporales que suceden en la pubertad en los niños son:
- Surgimiento de vello púbico;
- Surgimiento de vellos en las axilas, piernas y rostro;
- Voz más gruesa;
- Crecimiento y aumento del diámetro del pene;
- Aumento de tamaño de los testículos;
- Aumento de la oleosidad de la piel, siendo notado el aparecimiento del acné;
- Crecimiento de la laringe, popularmente conocida como "manzana de Adán".
En el caso de los niños, el principal signo de que está entrando en la pubertad es la primera eyaculación, la cual suele ocurrir entre los 12 y los 13 años.
Qué puede acelerar la pubertad
Se conoce como pubertad acelerada, cuando este proceso se presente a los 8 y 9 en las niñas y 9 y 10 en los niños. Ciertos factores pueden favorecer el crecimiento de los senos y la maduración de los órganos sexuales femeninos, como el aumento del índice de masa corporal (IMC), pues mientras haya más grasa acumulada en el cuerpo, mayor es el estímulo para la producción de estrógeno, que es la hormona responsable por las características femeninas. Conozca más sobre el IMC y cómo calcularlo.
Además, la exposición frecuente a sustancias químicas presentes en esmaltes y perfumes, por ejemplo, también puede favorecer la pubertad, esto porque algunos de sus constituyentes pueden alterar el sistema endocrino y, por ende, la producción hormonal, dando como resultado la pubertad.
Qué puede retrasar la pubertad
Las alteraciones comunes de la adolescencia pueden no ocurrir cuando el niño presenta alguna condición que interfiera directa o indirectamente en el crecimiento de las gónadas o en la producción de las hormonas sexuales.
Entre las condiciones que retrasan la pubertad, se encuentran:
- Malnutrición;
- Hipogonadismo;
- Diabetes mellitus;
- Trastornos alimentarios;
- Trastornos genéticos, como el síndrome de Turner, por ejemplo.
Asimismo, enfermedades autoinmunes como la enfermedad de Addison puede retrasar la pubertad, haciendo que las características propias de cada sexo se observen de forma tardía.