Las punzadas o puntadas en la cabeza normalmente suceden por haber pasado malas noches, exceso de estrés, cansancio, deshidratación o resfriado, siendo la mayoría de las veces, indicativo de migraña o de dolor de cabeza por alguna tensión.
No obstante, las punzadas también pueden ser un síntoma indicativo de problemas graves, como un accidente cerebrovascular (ACV), una aneurisma o incluso un tumor en el cerebro.
Por este motivo, cuando las punzadas en la cabeza son persistentes y no pasan, incluso con el uso de medicamentos, es importante acudir al neurólogo o al médico general para investigar la causa, a través de una evaluación y de la indicación de exámenes que permitan diagnosticar el problema e indicar el tratamiento más adecuado.
Principales causas
Las principales causas de que surjan punzadas en la cabeza son:
1. Dolor de cabeza tensional
El dolor de cabeza por tensión, llamada también cefalea tensional, también puede causar punzadas en la cabeza y normalmente sucede debido a una mala postura, ansiedad, insomnio, dificultad para dormir o estrés.
Normalmente, el dolor ocurre en la frente, pero también puede afectar en la parte lateral y hasta la zona del cuello. Además, el dolor no suele acompañarse de otros síntomas como vómitos o náuseas.
Qué hacer: generalmente, el dolor puede aliviarse por medio de técnicas de relajamiento, como masajes o baños calientes, para aliviar la tensión.
Sin embargo, en caso de que las punzadas en la cabeza sean persistentes, es importante consultar a un neurólogo o médico general para que realice una evaluación y se inicie el tratamiento adecuado, que puede incluir medicamentos como ibuprofeno o amitriptilina. Vea más sobre cómo aliviar la cefalea tensional.
2. Migraña
Las punzadas en la cabeza causadas por migraña generalmente ocurren en solo uno de los lados de la cabeza y es más común que suceda en caso de estrés, exceso o falta de sueño, o después del consumo de ciertos alimentos como chocolate o vino.
Además de las punzadas, pueden ocurrir otros síntomas como alteraciones en la vista, mareos, vómitos, alteraciones en el sueño y sensibilidad a algunos olores en caso de migraña.
Qué hacer: para tratar la migraña y controlar las punzadas, el médico puede indicar algunas medidas técnicas de relajamiento, psicoterapia, alimentación regular, practicar ejercicio con frecuencia y dormir.
Si embargo, en caso de sospecha de migraña es importante consultar a un neurólogo o médico general para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado, pudiendo indicarse el uso de medicamentos como ibuprofeno, sumatriptán o topiramato para controlar las crisis.
3. Abstinencia de cafeína
Cuando se detiene el consumo de café repentinamente, es común que aparezcan síntomas causados por la abstinencia de la cafeína, como dolores de cabeza, fatiga, dificultad para concentrarse, cambios en el estado de ánimo y dificultad para pensar con claridad. Consulte otros síntomas de abstinencia.
Los síntomas tienden a comenzar de 12 a 24 horas después de la última vez que una persona tomó café y pueden persistir hasta 9 días en algunos casos.
Qué hacer: normalmente, beber café mejora los dolores de cabeza debido a la abstinencia de cafeína. Sin embargo, si se desea dejar de beber café, se recomienda reducir gradualmente el consumo para evitar los síntomas de abstinencia.
Especialmente si los síntomas persisten, se recomienda consultar a un neurólogo para confirmar el diagnóstico. En ocasiones, el médico puede recomendar el uso de analgésicos como el paracetamol y el ibuprofeno para aliviar el dolor de cabeza.
4. ACV
El accidente cerebro vascular o ACV, normalmente sucede debido a una disminución del flujo sanguíneo al cerebro o por sangrado de vasos en su interior, lo que puede causar una punzada repentina e intensa en la cabeza.
Además, generalmente también ocurren otros síntomas como desmayos, alteración en la vista, pérdida de la sensibilidad en una parte del cuerpo y dificultad para levantar el brazo o sostener algún objeto. Conozca otros síntomas del ACV.
Qué hacer: en caso de sospecha de ACV se recomienda acudir al servicio de urgencias para que se realice una evaluación, ya que el diagnóstico y tratamiento adecuados ayudan a prevenir secuelas más graves.
5. Cefalea en racimos
La cefalea en racimos es un tipo de dolor de cabeza que provoca una sensación de punzadas en la cabeza, generalmente en uno solo de los lados. También puede estar acompañada de otros síntomas como enrojecimiento en la cara, lagrimeo y/o dolor en el ojo. Sepa más sobre la cefalea en racimos y cómo es el tratamiento.
Qué hacer: si se sospecha de una cefalea en racimos, se recomienda buscar atención médica de emergencia. Normalmente, las punzadas en la cabeza y otros síntomas mejoran con el uso de una máscara de oxígeno al 100% durante los episodios agudos.
Además, es importante consultar a un neurólogo para confirmar el diagnóstico y comenzar el tratamiento adecuado con el fin de prevenir nuevos episodios.
6. Presión alta
Algunas personas pueden experimentar punzadas en la cabeza cuando su presión arterial está muy alta, especialmente por encima de 180 x 120 mmHg, lo que podría indicar una crisis hipertensiva. En casos más graves, también pueden presentarse confusión mental, cambios en la visión y convulsiones, por ejemplo. Consulta los síntomas de la crisis hipertensiva.
Qué hacer: se debe medir la presión arterial para confirmar si está elevada. Se recomienda buscar atención médica de emergencia, especialmente si la presión arterial supera los 180 x 120 mmHg. En algunos casos, puede ser necesario tomar medicamentos antihipertensivos para reducir la presión arterial.
Además, es importante consultar a un cardiólogo en los próximos días para una evaluación y determinar si es necesario tomar medicamentos antihipertensivos de forma regular o ajustar las dosis de los medicamentos ya utilizados.
7. Aneurisma cerebral
El aneurisma cerebral es una dilatación permanente de un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro y que puede causar intensos y persistentes dolores de cabeza, además de visión doble, confusión mental, náuseas, vómito y desmayos, por ejemplo. Conozca todo sobre el aneurisma cerebral.
Qué hacer: en caso de sospecha de aneurisma, es importante consultar a un neurólogo para una evaluación y, cuando se confirma el diagnóstico, se inicia el tratamiento, el cual se realiza de acuerdo con las orientaciones del médico y las características del aneurisma.
Normalmente, cuando el aneurisma es pequeño, el médico puede optar por no realizar ningún tratamiento específico debido al bajo riesgo de sangrado. Sin embargo, cuando el aneurisma es grande y/o está asociado a un riesgo mayor de sangrado, el médico puede indicar la realización de cirugía.
8. Tumor en el cerebro
El tumor en el cerebro puede ocurrir debido alteraciones genéticas o metástasis de algún tipo de cáncer, que puede causar síntomas según el sitio de desarrollo del tumor, pudiendo haber puntadas en la cabeza, alteraciones en el tacto, debilidad muscular, hormigueo en el cuerpo y desequilibrio, por ejemplo.
Qué hacer: en caso de sospecha de tumor en el cerebro, se recomienda consultar a un neurólogo o un médico general, para realizar exámenes y confirmar el diagnóstico. Posteriormente, el tratamiento del tumor puede incluir su remoción por medio de cirugía, quimioterapia o radioterapia, dependiendo de su localización, tipo y tamaño. Conozca más sobre el tratamiento para el tumor cerebral.