La quemadura de 2º grado es el segundo tipo más grave de este tipo de accidentes, y generalmente se produce debido a accidentes domésticos con materiales calientes.
Este grado de quemadura produce mucho dolor y causa el surgimiento de una ampolla en la zona, la cual no debe ser perforada, ya que de esta forma se evita la entrada de microorganismos que puedan causar una infección.
En la mayoría de los casos, la quemadura de segundo grado puede ser tratada en casa mediante la aplicación de agua fría y pomadas para la quemadura, sin embargo, en caso de producir mucho dolor o que de tener un tamaño mayor a 1 palmo se recomienda acudir inmediatamente al servicio de urgencias.
Cómo reconocer una quemadura de 2º grado
La principal característica que ayuda a reconocer una quemadura de 2º grado es el surgimiento de una ampolla en la zona. Sin embargo, otros signos y síntomas comunes incluyen:
- Dolor, enrojecimiento o hinchazón;
- Surgimiento de una herida en la zona;
- Cicatrización más lenta, alrededor de 2 a 3 semanas;
Después de cicatrizar, la quemadura de 2º grado puede dejar una mancha más clara en las quemaduras superficiales, o una cicatriz en las más profundas.
Las quemaduras más comunes se producen dentro de la casa, con el contacto de agua o aceite hirviendo, tocar una superficie caliente como la estufa, contacto directo con el fuego o acercarse a este después de haber tenido contacto con alcohol.
Primeros auxilios para quemaduras de 2º grado
Los primeros auxilios en caso de quemadura de segundo grado incluyen:
- Retirar el contacto con la fuente de calor inmediatamente. Si la ropa de la víctima se encontrara en llamas debe tirarse al piso y rodar hasta que este se extinga, nunca se debe correr o cubrir a la víctima con cobertores en esta situación. En caso de que la ropa se adhiera a la piel, no intente retirarla ya que podría empeorar las lesiones en la piel, debiendo llevar a la persona a un hospital para que sea retirada la ropa adherida y tratadas las heridas por profesionales de la salud;
- Colocar la zona quemada debajo de agua fría durante 10 a 15 minutos o hasta que la piel deje de estar caliente. No se recomienda colocar agua demasiado fría ni hielo en la zona, ya que puede agravar la lesión en la piel;
- Cubrir con un paño limpio y mojado en agua fría. Esto ayuda a disminuir el dolor durante las primeras horas.
Después de retirar el tejido mojado se puede aplicar una pomada para quemaduras, ya que ayudará a mantener controlado el dolor además de estimular la cicatrización de la piel. Conozca ejemplos de pomadas para quemaduras que pueden utilizarse.
En ningún momento se deben perforar las ampollas de la quemadura, ya que puede aumentar el riesgo de infecciones, lo cual podría entorpecer la recuperación e incluso afectar la cicatrización, pudiendo necesitarse de tratamiento con antibióticos. En caso de ser necesario, la ampolla deberá ser perforada en el hospital, con material esterilizado y por un profesional.
Tratamiento de las quemaduras de 2º grado
En quemaduras menores que se producen por tocar la plancha o un sartén caliente, por ejemplo, el tratamiento puede realizarse en casa. Pero en quemaduras mayores en las que se ven involucradas la cabeza, rostro, cuello o áreas como brazos o piernas, el tratamiento debe ser prescrito por el médico, ya que es necesaria una evaluación completa del estado de salud de la víctima.
En quemaduras pequeñas de segundo grado se puede hacer una curación utilizando una pomada cicatrizante y después cubrir con una gasa y posteriormente poner una venda, por ejemplo. Conozca las pomadas para tratar las quemaduras.
En las grandes quemaduras se aconseja que la víctima permanezca internada por algunos días o semanas hasta que los tejidos hayan cicatrizado de forma correcta y el médico le dé el alta hospitalaria. Normalmente en quemaduras extensas de 2º y 3º la permanencia en el hospital es mayor, habiendo necesidad de utilizar medicamentos, suero para la rehidratación, dieta adaptada y fisioterapia hasta la recuperación completa.