Los remedios para la inflamación en el útero, como el té de jengibre, el té de equinácea y el té de granada, poseen sustancias con acción antiinflamatoria, antimicrobiana e inmunomoduladora, que ayudan a combatir la inflamación en el útero y a fortalecer el sistema inmunitario.
La inflamación en el útero puede ser causada principalmente por infecciones de transmisión sexual, como clamidia, gonorrea o VPH, o debido a cirugías en el útero, uso de DIU, parto prolongado o cesárea, por ejemplo, dando como resultado síntomas como secreción vaginal fétida y purulenta, dolor de cabeza, vértigos, vómito e irregularidades del ciclo menstrual.
Es importante resaltar que dichos remedios caseros para inflamación en el útero solo pueden ser usados para complementar el tratamiento indicado por el médico, el cual normalmente incluye el uso de medicamentos antibióticos, antiinflamatorios, antifúngicos o antivirales, y en algunos casos, cauterización del útero.
Conozca cómo es realizado tratamiento de la inflamación en el útero.
Remedios caseros para inflamación del útero
Algunos remedios caseros que pueden ser utilizados para inflamación del útero incluyen:
1. Té de jengibre
El té de jengibre es rico en sustancias antiinflamatorias, antioxidantes y antimicrobianas, como gingerol, shogaol, geranial y elinoide, que ayudan a aliviar los síntomas de inflamación en el útero, como cólicos y náuseas.
Asimismo, este té, preparado con la raíz de la planta medicinal Zingiber officinalis, posee propiedades tocolíticas, que disminuyen las contracciones del útero, siendo una buena opción de remedio casero para aliviar el dolor uterino en el posparto.
Ingredientes
- 1 cm de la raíz de jengibre cortada en rodajas o rallada;
- 1 litro de agua hirviendo.
Modo de preparación
Añadir el jengibre en una olla con el agua y dejar hervir durante 5 a 10 minutos. Dejar entibiar, colar y beber un máximo de 3 tazas por día.
Otra opción para preparar el té es sustituir la raíz por 1 cucharadita de jengibre en polvo, que debe ser diluido en agua hirviendo.
El té de jengibre debe ser evitado por mujeres que hacen uso de anticoagulantes como warfarina o ácido acetilsalicílico, pues puede aumentar el riesgo de sangrados o hemorragias.
2. Té de equinácea
El té de equinácea, elaborado con la planta Echinacea angustifolia, es rico en sustancias con acción antiinflamatoria e inmunomoduladora, como alcamidas, polisacáridos, glucoproteínas y derivados del ácido cafeico, que ayudan a fortalecer el sistema inmunitario, siendo una buena opción de remedio casero para inflamación en el útero causada por gonorrea o VPH, por ejemplo.
Ingredientes
- 1 cucharadita de raíz u hojas de equinácea;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación
Colocar la raíz o las hojas de equinácea en una taza de agua hirviendo. Dejar reposar por 15 minutos, colar y beber 2 veces al día.
Este té no debe ser usado por mujeres embarazas o en período de lactancia, o que tengan tuberculosis, leucemia, enfermedades del colágeno, esclerosis múltiple o enfermedades autoinmunes como artritis reumatoide, lupus o psoriasis, por ejemplo.
3. Té de llantén mayor
El té de llantén mayor, preparado con las hojas de la planta medicinal Plantago major, es una buena opción de remedio casero para inflamación en el útero causada por heridas, úlceras o verrugas uterinas, debido a sus propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias y antiespasmódicas.
Este té es rico en polifenoles y polisacáridos, que actúan protegiendo las células contra la destrucción causada por mediadores inflamatorios, lo que facilita la reparación de los tejidos, favoreciendo la cicatrización. Vea otros beneficios del llantén mayor.
Ingredientes
- 20 g de hojas de llantén mayor;
- 1 litro de agua.
Modo de preparación
Hervir el agua en una olla y después añadir las hojas de llantén mayor. Tapar y dejar reposar durante 3 minutos. Beber 4 tazas al día, hasta que la inflamación desaparezca.
Este té no debe ser tomado durante el embarazo ni por mujeres que tienen presión alta no controlada.
4. Té de granada
La granada posee propiedades antibacterianas, además de conseguir estimular el sistema inmunitario, pues es rica en zinc, magnesio y vitamina C. Por esta razón, el té de granada es una excelente opción para ayudar en el tratamiento de la inflamación en el útero.
Asimismo, este té es rico en beta-sitosterol, que posee acción antiinflamatoria, antioxidante y estimulante uterina, lo que ayuda a mejorar el flujo sanguíneo hacia el útero, favoreciendo la recuperación de esta región.
Ingredientes
- 10 gramos da cáscara de granada;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación
Añadir la cáscara de granada en una olla con el agua y llevar a ebullición. Cuando comience a hervir, dejar 5 minutos más y apagar el fuego. Después de este tiempo, tapar la olla, dejando reposar el té por 5 minutos más. Dejar entibiar y beber a continuación de 2 a 3 veces al día.
Además del té hecho con la cáscara, también es posible prepararlo con las hojas de granada secas. Para esto, basta colocar 2 cucharaditas de las flores en 500 ml de agua hirviendo, dejar reposar por 15 minutos, colar y beber 1 vez al día.
El té de granada no debe ser empleado por mujeres embarazas o en período de lactancia ni por personas que tengan gastritis o úlceras gástricas, pues puede causar irritación en el estómago.
5. Té de hojas de guayaba
El té de guayabo, elaborado con las hojas de la planta medicinal Psidium guajava, posee propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antiespasmódicas, que ayudan a aliviar el dolor, los cólicos y la inflamación en el útero.
Asimismo, este té posee propiedades antibióticas y cicatrizantes que contribuyen en la recuperación uterina.
Ingredientes
- 1 cucharadita de hojas secas de guayaba;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación
Colocar las hojas de guayaba picadas dentro de la taza y cubrir con el agua hirviendo. Tapar y dejar reposar por 10 minutos. Luego, colar y tomar este té de 3 a 4 veces al día.
El té de hojas de guayaba no debe ser utilizado por mujeres embarazadas o en período de lactancia, ni por aquellas que tienen el aparato digestivo muy sensible o problemas intestinales.