6 remedios caseros para lubricación femenina (¡comprobados!)

Evidencia científica

Los remedios caseros para la lubricación femenina, como la vitamina de banana con leche de soya, el té de hojas de morera o el té de anís, por ejemplo, poseen fitoestrógenos, los cuales ayudan a reducir la resequedad vaginal.

Esta condición puede ser causada principalmente por los cambios hormonales de la menopausia, pero también puede surgir por consumo excesivo de alcohol, poca ingesta de agua, período del ciclo menstrual o estrés, por ejemplo.

Los remedios caseros para aumentar la lubricación femenina deben ser empleados bajo orientación del ginecólogo luego de que sea identificada la causa de la resequedad vaginal, pudiendo complementar el tratamiento indicado por el médico. 

Este contenido tiene fines informativos y no reemplaza la orientación médica. No interrumpa ningún tratamiento sin la debida asesoría.
Mujer sentada tomando un té

Remedios caseros para la lubricación femenina

Entre los principales remedios caseros para la resequedad vaginal se incluyen los siguientes:

1. Batido de banana

Un buen remedio casero para la lubricación femenina es tomar diariamente un batido de banana con leche de soya y almendras. Esto debido a que la leche de soya y las almendras son ricas en fitoestrógenos, un tipo de estrógeno natural que ayuda a regular los niveles de esta hormona en el cuerpo, contribuyendo a la mejora de la lubricación vaginal.

Asimismo, la banana es rica en magnesio, que promueve la vasodilatación, aumentando la circulación sanguínea, y también posee triptófano, que mejora el humor, alterando la libido y estimulando sensaciones de placer, lo que acaba favoreciendo la lubricación. 

Ingredientes:

  • 1 banana;
  • 1 vaso de leche de soya;
  • 2 cucharadas de almendras.

Modo de preparación:

Batir todos los ingredientes en la licuadora y beber a continuación. Este batido puede ser ingerido 1 o 2 veces por día.

2. Té de hojas de morera

El té de hojas de morera, que es el árbol que produce moras negras, conocido científicamente como Morus nigra, contiene fitoestrógenos en su composición, los cuales ayudan a regular los niveles de estrógeno y a aliviar los síntomas de la menopausia, como la sequedad vaginal y la atrofia vaginal.

Ingredientes:

  • 10 hojas frescas de morera.
  • 1 litro de agua;

Modo de preparación:

Hervir el agua y después adicionar las hojas de morera bien lavadas y picadas. Dejar reposar por 10 a 15 minutos, colar y beber durante el día.

Otra opción es utilizar la mora negra en cápsulas, que pueden ser adquiridas en ciertas farmacias o en tiendas de productos naturales. 

El té de hojas de morera no debe ser empleado por mujeres con problemas gastrointestinales como gastritis o úlceras, hipertiroidismo, ansiedad, insomnio o enfermedades cardiovasculares o renales. 

3. Té de cimífuga

El té de cimífuga, preparado con la planta medicinal Cimicifuga racemosa, es rico en fitoestrógenos, que poseen un efecto semejante al estrógeno producido por el cuerpo.

Esto ayuda a regular los niveles de estrógeno y a combatir los síntomas de la menopausia, como bochornos y sequedad vaginal, mejorando el contacto íntimo. 

Ingredientes:

  • 1 cucharada de hojas secas de cimífuga;
  • 180 ml de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Colocar la cimífuga en el agua hirviendo y dejar reposar durante 3 minutos. Luego, colar, dejar entibiar y beber 2 o 3 veces al día, después de las comidas.

Otra forma de usar esta planta es en comprimidos, que pueden ser adquiridos en farmacias o droguerías. 

El té de cimífuga no debe ser empleado por mujeres embarazadas, en período de lactancia o que toman medicamentos anticoagulantes.

Asimismo, este té no debe ser consumido por mujeres diagnosticadas con cáncer de mama, de útero o de ovario, problemas cardíacos como arritmias, presión baja, problemas en el hígado o convulsiones.

Lea también: 15 remedios caseros para la menopausia (¡comprobados!) tuasaude.com/es/remedios-caseros-para-la-menopausia

4. Té de ginseng

El ginseng es una planta medicinal que aumenta la disponibilidad de óxido nítrico en el organismo, lo que facilita la vasodilatación, por lo que mejora la circulación sanguínea, especialmente en la región íntima.

Con el aumento de la sangre en la pelvis, incrementa la producción de lubricación natural, lo que puede mejorar la lubricación femenina.

Ingredientes:

  • 2 gramos de raíz de ginseng;
  • 200 ml de agua.

Modo de preparación:

Colocar el agua junto con las raíces de ginseng en una olla y dejar hervir durante 15 a 20 minutos. Después, dejar enfriar y colar. Este té se puede beber a lo largo del día, todos los días, hasta que mejore la sequedad vaginal.

El té de ginseng no debe ser empleado por mujeres con presión alta, artritis reumatoide, enfermedad de Crohn, enfermedades cardíacas o trastornos mentales.

5. Té de ashwagandha

El té de ashwagandha ayuda a regular hormonas, promoviendo un mejor funcionamiento de los órganos reproductores, como mejorar la lubricación femenina y la satisfacción durante el contacto íntimo.

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de raíz seca de ashwagandha;
  • 120 ml de agua.

Modo de preparación:

Llevar el agua a ebullición, apagar el fuego y adicionar el agua en una taza con la raíz seca de ashwagandha. Dejar reposar durante 15 minutos, colar y tomar tibio. Se recomienda beber 1 taza al día durante un período máximo de 6 meses.

El té de ashwagandha no debe ser empleado por mujeres embarazadas o en período de lactancia ni por personas con enfermedades autoinmunes, como artritis reumatoide o lupus, o que tengan úlceras estomacales.

6. Té de anís

El té de anís, elaborado con las semillas de la planta medicinal Pimpinella anisum, contiene flavonoides que ayudan a aliviar los síntomas de la atrofia vaginal en la menopausia, como sequedad vaginal, ardor, comezón o dolor durante el contacto íntimo. 

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de semillas de anís seco;
  • 1 taza de agua.

Modo de preparación:

Machacar o picar las semillas de anís. Hervir el agua y apagar el fuego. Transferir el agua a una taza y adicionar las semillas de anís. Tapar la taza y dejar reposar por 10 minutos. Colar y beber. Pueden ser consumidas hasta 3 tazas de este té por día, por un período máximo de 2 semanas seguidas.

El té de anís no debe ser consumido por niños menores de 12 años de edad, mujeres embarazadas o en período de lactancia, con hiperestrogenismo, cáncer de mama o que estén bajo tratamiento de reposición hormonal.

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