La rinoplastia es la cirugía plástica de la nariz, la cual es indicada para fines estéticos, como mejorar el perfil o alterar la punta de la nariz, o reducir el ancho del hueso, por ejemplo. Asimismo, también puede ser indicada para mejorar la funcionalidad de la nariz, como en el caso de la corrección del desvío del tabique nasal, lo que contribuye de forma positiva a la respiración.
Esta cirugía es llevada a cabo por un cirujano plástico, bajo anestesia general o local, lo que depende de la técnica utilizada, pudiendo ser realizada por el servicio público de salud de cada país, en los casos de problemas de respiración, o en clínicas privadas para fines estéticos.
Luego de la rinoplastia, es importante que la persona tenga algunos cuidados para que la cicatrización se dé adecuadamente y poder evitar complicaciones. Por esta razón, se recomienda que la persona siga todas las recomendaciones del cirujano plástico, como evitar esfuerzos y usar el vendaje por el tiempo determinado por el médico.
Principales indicaciones
Las principales indicaciones de la rinoplastia incluyen:
- Disminuir el ancho del hueso nasal;
- Alterar la dirección de la punta de la nariz;
- Alterar la forma de la punta de la nariz;
- Mejorar el perfil nasal;
- Reducir las narinas grandes, anchas o respingadas;
- Corregir deformidades congénitas de la nariz;
- Corregir traumas, fracturas o lesiones en la nariz.
Asimismo, la rinoplastia para mejorar la funcionalidad de la nariz y la respiración es indicada en los casos de obstrucción nasal causada por pólipos, hipertrofia de cornetes o desvío del tabique. Vea qué es el desvío del tabique nasal y cuáles son sus síntomas.
¿A qué edad se puede hacer la rinoplastia?
La rinoplastia generalmente puede ser realizada a partir de los 15 años de edad en las mujeres, y los 17 años en los hombres, pues es la fase en la que las estructuras nasales están completamente desarrolladas y la forma de la nariz ya no va a cambiar mucho.
Sin embargo, en caso de accidentes, traumas o fracturas en la nariz, la rinoplastia puede ser realizada antes de las edades mencionadas anteriormente.
Cómo prepararse para la rinoplastia
Antes de llevar a cabo la rinoplastia, es fundamental conversar con el cirujano plástico sobre cómo será realizado el procedimiento, los posibles riesgos implicados y la simulación del resultado final, puesto que la misma corresponde a un procedimiento definitivo.
Además, se debe informar al médico si se tienen problemas de salud o alergias, y si son empleados medicamentos o drogas ilícitas, pues estos pueden interferir en el resultado de la cirugía.
Para programar la rinoplastia, el médico debe hacer un examen físico de la nariz, las fosas nasales, el cartílago en la punta de la nariz, las estructuras faciales y el grosor de la piel, para analizar las alteraciones que requieren ser realizadas, por ejemplo; además de exámenes de laboratorio y de riesgo quirúrgico, para verificar si hay alguna contraindicación y garantizar la seguridad de la persona.
Cómo se realiza la rinoplastia
La rinoplastia es realizada por el cirujano plástico en el hospital, bajo anestesia general o local, la cual varía según la técnica quirúrgica empleada.
Para hacer la rinoplastia, el médico debe seguir los siguientes pasos:
- Administrar la anestesia general en la vena o aplicar el anestésico local;
- Realizar un corte en el interior de la nariz o en el tejido entre las narinas para levantar la piel que recubre la nariz;
- Remodelar la estructura de la nariz, de acuerdo con lo deseado por la persona y lo planificado por el médico;
- Cerrar el corte con puntos de sutura.
Al final de la cirugía, es colocada una especie de férula dentro de la nariz, además de aplicar vendajes y tapones para proteger y dar soporte a la nariz, y facilitar la recuperación.
Cómo es la recuperación
La recuperación de la rinoplastia es relativamente sencilla y tarda alrededor de 10 a 15 días, siendo necesario que la persona permanezca con el rostro cubierto en los primeros días para que la nariz tenga soporte y esté protegida, facilitando la cicatrización.
Es normal que durante el proceso de recuperación, la persona sienta dolor, molestias, hinchazón en el rostro u oscurecimiento de la zona; no obstante, esto se considera normal y suele desaparecer a medida que se produce la cicatrización.
Es importante que durante el período de recuperación la persona no esté expuesta frecuentemente al sol, para evitar manchar la piel; que duerma boca arriba, no utilice lentes de sol y evite hacer esfuerzos durante 15 días después de la cirugía o hasta recibir el alta.
El médico puede recomendar el uso de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios después de la cirugía para aliviar el dolor y el malestar, los cuales deber ser usados durante 5 a 10 días de acuerdo con la recomendación del médico.
Posibles complicaciones
Debido a que se trata de un procedimiento invasivo y que se realiza bajo anestesia general o local, puede haber algunas complicaciones durante o después de este, a pesar de que no sean frecuentes.
Las principales alteraciones de la rinoplastia son rotura de pequeños vasos en la nariz, presencia de cicatrices, alteraciones del color de la nariz, adormecimiento y asimetría de la nariz.
Además, pueden surgir infecciones, alteración en el paso del aire por la nariz, perforación del tabique nasal o complicaciones cardíacas y pulmonares. Sin embargo, estas complicaciones no surgen en todas las personas y se producen con más frecuencia en personas que realizan este procedimiento con médicos que tienen poca experiencia.
Para evitar las complicaciones, es posible remodelar la nariz sin que sea necesaria una cirugía plástica, pudiendo hacerse con maquillaje o usando modeladores de la nariz, por ejemplo.