Qué es:
La rotura de aguas o la ruptura de la fuente es cuando el saco amniótico, que es la bolsa membranosa que rodea al bebé, se rompe y libera el líquido amniótico que se encuentra en su interior. Por lo general, este es uno de los signos que surgen al inicio o durante el trabajo de parto.
Ante esta situación, lo ideal es mantener la calma pues una vez que esto ocurre todo indica que el bebé va a nacer. Es importante acudir para el hospital siempre que se sospeche de la ruptura del saco, pues cualquier laceración, por menor que sea, puede facilitar la entrada de microorganismos y, por ende, afectar al bebé y a la madre.
1. ¿Cómo saber si rompió aguas?
Cuando ocurre la rotura del saco amniótico se expulsa un líquido transparente o amarillo claro y sin olor, el cual no se logra controlar y puede ir saliendo en mucha o en poca cantidad pero constantemente.
No siempre es fácil identificar cuando ocurre esta ruptura de la fuente, por este motivo ante cualquier duda debe contactar a su médico tratante o acudir a la maternidad.
Normalmente, algunos días antes de la rotura del saco, la mujer siente la expulsión del tapón mucoso, que es una especie de secreción amarilla y espesa parecida a la flema, el cual cerraba el cuello del útero, protegiendo al bebé. En ciertas mujeres, este tapón puede estar mezclado con sangre y salir con pintas rojas o marrones, como si fuese el final de la menstruación.
2. ¿Qué hacer cuando esto ocurre?
En primer lugar no se debe entrar en pánico, debiendo limpiarse y colocarse una toalla sanitaria nocturna, esto permitirá que los médicos sepan cuál es la coloración del líquido, además de darles una idea de la cantidad que se ha perdido, evaluando si hay algún riesgo para la mujer o para el bebé.
A continuación, se debe contactar al médico tratante o en su defecto acudir a la maternidad para que realicen una ecografía, esta permitirá verificar la cantidad de líquido amniótico, así como evaluar que todo se encuentre bien con el bebé y que todo se esté desarrollando con normalidad.
3. ¿Qué hacer si se rompe la bolsa antes de las 37 semanas?
En los casos donde la ruptura de aguas se de antes de las 37 semanas de gestación, se conoce como rotura prematura de membranas, siendo de suma importancia buscar atención médica urgente.
4. ¿Qué hacer si se rompe aguas pero no surgen las contracciones?
Cuando el saco se rompe, se espera que las contracciones uterinas que marcan el inicio del trabajo de parto surjan en poco tiempo. Sin embargo, las contracciones pueden demorar hasta 48 horas en aparecer, por lo que se aconseja, de igual forma, acudir a la maternidad después de 6 horas de la rotura del saco, pues esto puede permitir la entrada de microorganismos en el útero, aumentando así el riesgo de infecciones.
En el hospital, el médico podrá esperar algunas horas para determinar si las contracciones se inician espontáneamente, administrando antibióticos para disminuir el riesgo de infección. También se puede inducir el parto normal mediante el uso de hormonas sintéticas o dar inicio a la cesárea, dependiendo de cada caso.
Signos de alarma
Si el saco se rompió y la mujer aún no ha acudido al servicio de urgencias, es importante prestar atención a los siguientes signos de alerta:
- Disminución de los movimientos del bebé;
- Cambio en el color del líquido amniótico;
- Presencia de fiebre, incluso si es baja.
Estas situaciones pueden indicar complicaciones para el bebé y la mujer, por lo que es importante que estar alerta de ellos, ya que puede necesitar de una evaluación y atención médica inmediatas.
Cuándo acudir al servicio de urgencias
Se debe acudir al servicio de urgencias si el saco se rompe antes de las 37 semanas de gestación, hasta 6 horas después de la rotura del saco (cuando se desee el parto normal) e inmediatamente si el saco se rompe antes de la fecha programada por el médico para la cesárea o parto. Conozca los síntomas que indican que el trabajo de parto está comenzando.