Roncar es hacer un sonido o ruido rítmico durante el sueño, que es causado por la relajación de las paredes de la faringe, lo que dificulta el paso de aire por las vías aéreas y da como resultado síntomas como sonido de traqueteo, respiración jadeante o resoplido, somnolencia durante el día y/o dolor de cabeza.
El ronquido o roncopatía no siempre es considerado un problema, pudiendo ocurrir cuando la persona duerme boca arriba. Sin embargo, también puede ser ocasionado por enfermedades, como apnea obstructiva de sueño e hipertrofia de adenoides, por ejemplo.
Lea también: Apnea del sueño: qué es, síntomas y tratamiento tuasaude.com/es/apnea-del-suenoEn caso de ronquidos persistentes o intensos, principalmente si hay síntomas asociados, es importante consultar un otorrinolaringólogo o médico especialista en medicina del sueño, para que sea identificada la causa e indicado el tratamiento más adecuado, de ser necesario.
Principales síntomas
Los principales síntomas de ronquido incluyen:
- Ruido de estrépito, silbido, ahogo, traqueteo o gruñido;
- Respiración jadeante o resoplido;
- Sueño agitado;
- Garganta seca al despertar;
- Cansancio o somnolencia durante el día;
- Dolor de cabeza por la mañana.
Asimismo, también puede ocurrir irritabilidad, cambios de humor o dificultad de concentración, principalmente cuando los ronquidos son frecuentes e interfieren en el sueño.
Otros síntomas son pausas respiratorias durante el sueño, o sonidos muy altos que pueden interferir en el sueño de la pareja.
Es importante consultar al médico del sueño u otorrinolaringólogo siempre que el ronquido sea frecuente, interfiera en las actividades diarias o provoque paro respiratorio por algunos segundos durante el sueño, para que sea realizado el diagnóstico, identificada la causa e indicado el tratamiento más adecuado.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de los ronquidos es llevado a cabo por el médico especialista en medicina del sueño o el otorrinolaringólogo a través de la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud y el examen físico de las vías aéreas superiores.
Asimismo, el médico puede solicitar exámenes como radiografías, tomografía computarizada o resonancia magnética para evaluar si existen problemas de salud, como adenoides hipertrofiadas o desviación del tabique nasal.
Otro examen que el médico puede pedir es una polisomnografía, que es realizada mientras la persona duerme. Vea cómo es realizada la polisomnografía.
Principales causas
Las principales causas del ronquido son:
- Alteraciones de los huesos de la cara, como mentón retraído o boca más pequeña;
- Apnea obstructiva del sueño;
- Hipertrofia de las amígdalas o de las adenoides;
- Rinitis crónica, sinusitis o pólipos nasales;
- Consumo excesivo de alcohol;
- Uso de medicamentos para dormir.
Asimismo, el tabaquismo, el sobrepeso, el envejecimiento, la menopausia, las enfermedades como hipotiroidismo y obesidad, y los antecedentes de ACV aumentan el riesgo de ronquidos.
El ronquido sucede durante el sueño debido a la relajación de los músculos de la garganta y de la lengua, que quedan posicionadas un poco más atrás, dificultando el paso del aire, lo que provoca la vibración de la lengua, el paladar o la epiglotis. Conozca más causas de los ronquidos y qué hacer.
Cómo dejar de roncar
El tratamiento del ronquido generalmente es indicado por un otorrinolaringólogo y puede incluir:
1. Cambios de hábitos
Algunas medidas como evitar el consumo de alcohol y medicamentos sedantes antes de dormir, perder peso, dejar de fumar y evitar dormir boca arriba, son importantes porque ayudan a evitar el ronquido al disminuir la dificultad del paso de aire por las vías aéreas durante el sueño. Conozca más consejos para dejar de roncar.
2. Ejercicios para dejar de roncar
Existen ejercicios que ayudan a fortalecer la musculatura de las vías aéreas, lo que puede disminuir la intensidad de los ronquidos. Estos ejercicios deben ser realizados con la boca cerrada, evitando mover el mentón u otras partes del rostro, concentrándose únicamente en la lengua y en el paladar o en la parte de arriba de la boca, de la siguiente forma:
- Presionar la lengua contra el paladar y deslizar para atrás, como si estuviese barriendo, repitiendo este ejercicio 20 veces o lo máximo que pueda lograr;
- Presionar la punta de la lengua contra el paladar, como si estuviera pegada, y mantener por 5 segundos, repitiendo este ejercicio 20 veces;
- Bajar la parte posterior de la lengua, contrayendo también la garganta y la úvula 20 veces;
- Elevar el paladar, repitiendo el sonido “Ah”, e intentar mantenerlo contraído durante 5 segundos, 20 veces;
- Colocar un dedo entre los dientes y la mejilla, y empujar el dedo con la mejilla hasta presionar los dientes, manteniendo contraído durante 5 segundos y alternar los lados;
- Inflar un globo de cumpleaños con las mejillas contraídas. Al sacar el aire, se debe llenar la barriga, al soplar el aire, se debe sentir la contracción de la musculatura de la garganta.
Para conseguir hacer bien los movimientos, es necesario algún tipo de entrenamiento, siendo recomendado que sean realizados bajo orientación del fonoaudiólogo.
3. Dispositivos orales
Algunos dispositivos similares a los protectores bucales pueden ser indicados para mantener las vías aéreas abiertas durante la noche, facilitando el flujo del aire. Generalmente, estos dispositivos son indicados por odontólogos o médicos con experiencia en este tipo de prótesis.
4. Dispositivos de CPAP
Los dispositivos de CPAP, que generalmente consisten en una máscara que se ajusta al rostro o nariz y un tipo de respirador, son útiles en algunos casos porque ayudan en la respiración durante la noche, manteniendo las vías aéreas abiertas, facilitando el paso del aire.
5. Tratar enfermedades relacionadas
En el caso del que el ronquido esté asociado a enfermedades como hipertiroidismo o síndrome de ovario poliquístico, por ejemplo, es importante realizar un tratamiento para estos problemas, de acuerdo con la orientación del médico, pues así es posible aliviar y evitar los ronquidos.
6. Cirugía
La cirugía generalmente es indicada cuando el ronquido es causado por hipertrofia de las amígdalas y pólipos nasales; sin embargo, existen algunas cirugías que también pueden ser indicadas incluso si no se encuentra la causa específica del ronquido después de ser realizadas todas las evaluaciones por el médico, como uvuloplastia asistida por láser y la inyección por roncoplastia.