Qué es:
La sal es cloruro de sodio (NaCl), la cual aporta un de 39,34% de sodio y un 60,66% de cloro, dependiendo del tipo de sal puede aportar otros minerales al organismo.
La cantidad de sal que se puede consumir diariamente son 5 g distribuidos en todas las preparaciones del día, lo que equivale a 5 paquetes de sal de 1 g o a una cucharadita de café. La sal más saludable es aquella que posee menor concentración de sodio, pues este es responsable por el aumento de la presión arterial y por favorecer la retención de líquido.
Otro punto importante para escoger la mejor sal es optar por las que no son refinadas, puesto que preservan los minerales naturales y no se le añaden sustancias químicas, como en el caso de la sal del Himalaya, por ejemplo.
Tipos de sal
En la tabla a continuación se indican los diferentes tipos de sal, cuáles son sus características, qué cantidad de sodio aportan y cómo se utilizan:
Los alimentos industrializados contienen grandes cantidades de sodio, incluso refrescos, helados o galletas, que son alimentos dulces. Por esta razón, se recomienda siempre leer el rótulo y evitar el consumo de productos con cantidades iguales o superiores a 400 mg de sodio por cada 100 g de alimento, especialmente en el caso de hipertensión.
Cómo consumir menos sal
Independientemente de la sal utilizada en la cocina, es importante usar la menor cantidad posible. De esta forma, para disminuir el consumo de sal debe:
- Retirar el salero de la mesa;
- No colocar sal en la comida sin antes probarla;
- Evitar consumir panes y alimentos industrializados, como botanas (snacks), papas fritas, condimentos en polvo o en cubos, salsas listas y embutidos, como salchicha, jamón serrano y nuggets;
- Evitar consumir alimentos en conserva, como aceitunas, palmito, maíz y guisantes;
- No usar glutamato monosódico (ajinomoto), presente en salsa inglesa, salsa de soya y sopas instantáneas;
- Usar siempre una cucharita de café para medir la sal en lugar de añadirla mediante pizcas;
- Sustituir la sal por condimentos naturales como cebolla, ajo, perejil, cebollín, orégano, cilantro, limón y hierbabuena, por ejemplo; o cultivar plantas aromáticas en casa para sustituir la sal.
Otra estrategia para sustituir la sal de forma saludable es utilizar el gomashio, el cual es elaborado con semillas de sésamo y sal; y posee un bajo contenido de sodio y un alto contenido de calcio, aceites saludables, fibras y vitaminas del complejo B.
Receta de sal de hierbas
En lugar de usar sal común en la preparación de alimentos, puede preparar una sal de hierbas, como se indica a continuación:
Ingredientes
- 1/2 taza de cualquier tipo de sal;
- 1/2 taza de orégano deshidratado;
- 1/2 taza de albahaca deshidratada;
- 1/2 taza de romero deshidratado;
- 1/2 taza de perejil deshidratado.
Modo de preparación
Mezclar todos los ingredientes, guardar en un frasco o recipiente y usar en la preparación de las comidas.