Sangre en el oído: 7 causas y qué hacer

El sangrado en el oído puede ser causado por una ruptura del tímpano, infección en el oído, barotrauma, lesión en la cabeza o por la presencia de algún objeto que se haya quedado atrapado en el oído.

El sangrado puede provenir de la parte externa, media o interna del oído, dependiendo de cuál sea el problema, y puede estar asociado a otros síntomas como mareos, perdida de la audición o fiebre, por ejemplo.

Por este motivo, lo ideal en estos casos es acudir inmediatamente al médico general u otorrinolaringólogo para que realice una evaluación, determine la causa e indique el tratamiento más adecuado, evitando así posibles complicaciones.

7 causas de sangre en el oído

Las principales causas de sangre en el oído son:

1. Limpiarse los oídos con hisopos

Limpiarse los oídos con un hisopo puede causar daño si se introduce demasiado profundo o se usa con fuerza, lo que puede llevar a sangrado.

Esto ocurre porque los hisopos pueden raspar o irritar la piel delicada del canal auditivo o incluso perforar el tímpano, lo que podría causar dolor, infección y pérdida auditiva temporal o permanente en casos graves.

Qué hacer: se debe evitar el uso de hisopos para la limpieza de los oídos. Lo ideal es limpiar la parte externa con un paño húmedo, sin introducir nada en el canal auditivo.

En el caso de acumulación de cera, existen gotas y otros tratamiento, que deberán ser indicados por el otorrinolaringólogo, para extraer este exceso. 

2. Perforación del tímpano

La perforación del tímpano puede causar síntomas como sangrado en el oído, dolor y molestia en el sitio, pérdida de la audición, zumbido y vértigos, que pueden ser acompañados por náuseas o vómitos. Conozca más sobre los síntomas del tímpano perforado. 

Qué hacer: generalmente, las perforaciones del tímpano se regeneran después de algunas semanas, durante este tiempo se debe proteger el oído con un algodón o un tapón adecuado cuando esté en contacto con el agua. El médico también puede indicar el uso de antibióticos y antiinflamatorios.

3. Otitis media

Una otitis media es una inflamación del oído, que generalmente resulta de una infección y puede causar síntomas como presión o dolor en el sitio, fiebre, problemas de equilibrio y secreción de líquido. 

Qué hacer: el tratamiento depende del agente causante de la otitis, pero generalmente es realizado con analgésicos y antiinflamatorios y, cuando es necesario el médico puede prescribir un antibiótico.

4. Barotrauma

El barotrauma del oído se caracteriza por una gran diferencia de presión entre la región exterior del canal auditivo y la región interior, lo que puede suceder cuando ocurren cambios repentinos de altitud, como al viajar en avión o bucear, por ejemplo, pudiendo causar lesiones en el tímpano.

Qué hacer: generalmente el tratamiento consiste en la administración de analgésicos y en casos más graves puede ser necesario recurrir a una corrección quirúrgica.

5. Objeto atascado en el oído

El sangrado resultante de objetos que quedan atascados en el oído ocurren generalmente en niños, pudiendo ser peligrosos si no son detectados a tiempo.

Qué hacer: evitar dejar objetos de pequeña dimensión al alcance de niños. En caso de que un objeto quede atorado en el oído, lo ideal es acudir inmediatamente al médico otorrinolaringólogo para que el objeto sea retirado con los instrumentos médicos adecuados.

6. Lesión en la cabeza

En algunos casos, una lesión en la cabeza causada por una caída, accidente o golpe, puede provocar la aparición de sangre en el oído, lo que puede ser un signo de sangrado alrededor del cerebro. Vea más sobre un traumatismo craneoencefálico. 

Qué hacer: en estos casos, se debe acudir inmediatamente a la emergencia médica, para que se realicen los exámenes de diagnósticos y evitar que se produzcan daños cerebrales graves.

7. Cáncer en el oído

A pesar de ser una situación demasiado rara, el cáncer puede ser una causa de sangre en el oído, los principales tipos son: el carcinoma de células escamosas del conducto auditivo externo y el carcinoma de células basales, los cuales pueden producir dolor en el oído, salida de pus y/o sangre, además de ganglios inflamados en el cuello, en casos avanzados.

Estos tipos de cáncer pueden desarrollarse debido a la exposición solar prolongada e infecciones crónicas del oído, ya sea por falta de diagnóstico, tratamiento inadecuado, resistencia a antibióticos o un mal seguimiento de las orientaciones médicas. 

Qué hacer: en caso de presentar síntomas como salida de pus o sangre y dolor intenso, se debe acudir con un otorrinolaringólogo para que realice una evaluación profunda del conducto auditivo y solicite las pruebas necesarias para descartar o confirmar un posible cáncer e iniciar el tratamiento adecuado.