El algodoncillo en bebés es una infección que ocurre en la boca causada por un hongo llamado Candida albicans, siendo más común en bebés con menos de 6 meses, debido a que el sistema inmunitario no se encuentra totalmente maduro, ocasionando pequeños puntos blancos o placas blancas que pueden confundirse con restos de leche en la boca del bebé.

El bebé recién nacido puede contraer el sapito, conocido científicamente como candidiasis oral, al momento del parto, debido al contacto con el canal vaginal de la madre o por contacto con objetos mal lavados, como biberones o chupones. El uso de antibióticos también puede ser otra causa del desarrollo de este hongo, debido a que altera la microbiota de la boca.

Siempre que se sospeche del algodoncillo en el bebé, es importante consultar al pediatra para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento más adecuado, que por lo general consiste en el uso de un antifúngico líquido.

Síntomas del algodoncillo en bebés

Los principales síntomas del algodoncillos son:

Puntos o placas blancas con aspecto de queso cuajado en los labios, lengua, paladar, encías, amígdala o en la parte interna de las mejillas;
Piel agrietada en la comisura labial;
Enrojecimiento de la boca;
Sangrado en la región afectada de la boca al intentar limpiar la mancha blanca;
Llanto constante;
Irritación o agitación;
Dificultad para tragar;
Disminución del apetito.

Además, el bebé puede tener dificultades para amamantar o negarse a amamantar, lo que puede provocar deshidratación, que se puede percibir a través de síntomas como disminución de la frecuencia urinaria, sequedad de la piel, la boca o la lengua, hundimiento de la mollera o somnolencia excesiva. Vea cómo identificar los síntomas de deshidratación en el bebé.

En algunos casos, el sapito también puede provocar la aparición de puntos blancos en las uñas y pliegues de la piel, por ejemplo.

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico del algodoncillo es realizado por el pediatra a través de la evaluación de la boca del bebé y, por lo general, no es necesario la realización de otras pruebas complementarias.

Principales causas

El algodoncillo es causada por el hongo Candida albicans que puede transmitirse al bebé al nacer y atravesar por el canal de parto. Sin embargo, la causa más común de la candidiasis es el contacto del bebé con el hongo que puede estar presente en el biberón o el chupón.

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Además, si el bebé está siendo amamantado y la mujer tiene una infección por hongos en el pezón, llamada candidiasis mamaria, el hongo también puede transmitirse al bebé y causar candidiasis. Vea cómo identificar la candidiasis mamaria.

En el caso de tratamientos con antibióticos, por parte de la mujer o del bebé, también existe un mayor riesgo de que el hongo se desarrolle y provoque el sapito en el bebé.

Cómo quitar el algodoncillo

El tratamiento para el algodoncillo en el bebé debe ser indicado por el pediatra, el cual puede recomendar la aplicación de un antifúngico en forma de líquido, crema o gel, como la nistatina o el miconazol, en la región afectada de la boca.

Además de esto, la aplicación de una crema antifúngica en los pezones de la mujer que amamanta también es una forma de tratamiento, evitando así la retransmisión del hongo desde el seno de la madre hacia al bebé nuevamente. En estos casos, el tratamiento debe ser orientado por el ginecólogo, el cual suele indicar el uso de antifúngicos en forma de pomadas o comprimidos.

Cuidados durante el tratamiento

Durante el tratamiento del sapito en bebés es importante tomar algunas precauciones para evitar la reinfección con el hongo, que incluye:

Lavar bien las manos con un jabón suave y séquese con una toalla limpia y seca antes de manipular al bebé;
Evitar besar al bebé;
Esterilizar las chupetas, biberones o juguetes que el bebé se lleve a la boca, debiendo hervirlas en agua durante al menos 20 minutos después de cada uso;
Lavar los pañales de tela o ropa que hayan estado en contacto con la boca del bebé, a una temperatura de 60 grados o en agua hirviendo;
Hervir las piezas del extractor de leche durante 20 minutos después de cada uso.

Además, también es importante mantener la mama siempre seca y limpia, debiendo utilizar discos absorbentes de lactancia, que deben desecharse siempre que estén húmedos para evitar la proliferación del hongo.

Remedio natural para tratar el algodoncillo

Durante el tratamiento del algodoncillo también se puede utilizar un remedio natural para aliviar las molestias del bebé, que consiste en aplicar una gasa empapada en té de granada, que tiene propiedades antisépticas y ayuda a desinfectar la boca del bebé.

Se puede preparar té de granada hirviendo las cáscaras de una granada en 250 ml de agua y, tras dejarlo enfriar, se puede aplicar sobre las manchas blancas de la boca del niño con una gasa empapada en el té, dejándolo actuar durante 10 minutos, y lavarse la boca con agua corriente inmediatamente después. Esta aplicación se puede repetir de 3 a 4 veces al día durante aproximadamente una semana.

Es importante señalar que el té de granada, así como cualquier otro remedio casero, es utilizado para complementar el tratamiento indicado por el pediatra pero nunca para sustituirlo.