La Saxenda es un medicamento inyectable utilizado para adelgazar en personas que tienen obesidad o sobrepeso, ya que ayuda a disminuir el apetito y a controlar el peso corporal, pudiendo causar la disminución de hasta un 10% del peso total de la persona, principalmente cuando se asocia a una dieta saludable y a la práctica de actividad física de forma regular.
El principio activo de la Saxenda es la liraglutida, una sustancia que actúa en las regiones del cerebro que regulan el apetito, esto hace con que el individuo sienta menos hambre y consuma menos cantidad de alimentos, es decir, menos calorías a lo largo del día, siendo este el motivo por el cual se produce la pérdida de peso.
Este medicamento puede ser comprado en las farmacias convencionales con la presentación de una receta médica. La Saxenda viene en forma de pluma, por lo que debe ser aplicada sobre la piel, y contiene 3 ml de solución inyectable de liraglutida. La dosis y el tiempo de utilización de este medicamento debe ser indicado por el médico.
Para qué sirve
La Saxenda está indicada para el tratamiento de:
- Obesidad con IMC superior a 30 kg/m2 o
- Sobrepeso con IMC superior a 27 kg/m2 con enfermedades asociadas, como hipertensión arterial, diabetes tipo 2, dislipidemia o colesterol alto.
La clasificación del índice de masa corporal (IMC) ayuda a calcular e indicar cuál debe ser el peso ideal, pudiendo auxiliar en la planificación de la dieta y de la pérdida de peso. Conozca su IMC utilizando nuestra calculadora online e introduciendo sus datos a continuación:
Cómo usar y en qué dosis
La Saxenda se utiliza según la orientación del médico, pero la posología recomendada por el fabricante es una una aplicación por día debajo de la piel del abdomen, muslo o brazo, a cualquier hora, independientemente de los horarios de las comidas.
La pluma de la Saxenda contiene 3 mL de solución lista para su uso, conteniendo 6 g de liraglutida por cada 1 mL de la solución, debiendo siempre tener el cuidado de colocar en la pluma la dosis correcta, de acuerdo con la semana de tratamiento y orientación médica.
Las dosis de la Saxenda dependen de la semana de tratamiento, e incluyen:
No se debe exceder la dosis máxima de 3 mg por día. Es importante recordar que se debe seguir el plan de tratamiento indicado por el médico, y se deben respetar las dosis y la duración del mismo.
Si olvidó aplicarse una dosis de Saxenda debe aplicársela tan pronto lo recuerde. Sin embargo, si han pasado más de 12 horas, se debe omitir esta dosis, debiendo aplicarse la siguiente dosis en el horario habitual. No se deben duplicar las dosis para compensar la olvidada.
Además, el tratamiento con Saxenda sólo será eficaz si se complementa con un plan nutricional equilibrado y con la realización de actividad física de forma regular. Vea algunos consejos para bajar de peso de forma saludable.
Cómo aplicar la inyección
Para aplicar correctamente la Saxenda en la piel, se deben seguir los pasos a continuación:
- Retirar la tapa de la pluma;
- Colocar una nueva aguja en la punta de la pluma, enroscando hasta apretar;
- Quitar la protección exterior e interior de la aguja, botando la protección interior;
- Girar la parte superior de la pluma para seleccionar la dosis indicada por el médico;
- Insertar la aguja en la piel, en un ángulo de 90º;
- Presione el botón de la pluma hasta que el marcador de dosis muestre el número 0;
- Contar lentamente hasta 6 con el botón presionado y, después, retirar la aguja de la piel;
- Colocar la cubierta exterior de la aguja y quitar la aguja, arrojándola a la basura;
- Colocar la tapa de la pluma.
Si hay dudas sobre cómo utilizar la pluma es importante consultar al médico o a una enfermera para recibir las instrucciones más correctas.
Posibles efectos secundarios
Los efectos secundarios más comunes que pueden surgir durante el tratamiento con Saxenda incluyen náuseas, diarrea, estreñimiento, vómito, dolor de cabeza, mareos, cansancio y/o pérdida de apetito.
En casos más raros también puede ocurrir gastritis, mala digestión, malestar gástrico, dolor en la región superior del estómago, acidez, aumento de los eructos y gases intestinales, boca seca, debilidad o cansancio, cambios en el paladar, cálculos biliares, reacciones en la región donde se coloca la inyección.
Además, la Saxenda también puede causar hipoglucemia, que es una disminución de la cantidad de azúcar en la sangre, manifestándose síntomas como aumento del hambre, producción excesiva de sudor, irritabilidad, mareos, corazón acelerado, sensación de ansiedad o temblores. Es importante consultar al médico si presenta estos síntomas, pues podría ser necesario modificar la dosis del medicamento.
La Saxenda también puede causar reacciones alérgicas graves que necesitan de atención médico inmediato. Por esto, si este fuera el caso se debe interrumpir el tratamiento de inmediato y acudir a las urgencias más cercanas si presenta síntomas como dificultad para respirar, tragar, palpitaciones cardíacas, mareos, comezón intensa e hinchazón en la boca, lengua o rostro. Vea cómo identificar los síntomas de una reacción alérgica grave.
Contraindicaciones
El Saxenda está contraindicado en niños y adolescentes con menos de 18 años, durante el embarazo y la lactancia materna. Además, tampoco debe ser usado por personas con alergia a la liraglutida o cualquier otro componente del medicamento.
Asimismo, tampoco debe ser utilizado por personas que toman otros medicamentos agonistas del receptor de GLP-1, como la Victoza, por ejemplo, o que tengan o hayan tenido un tumor en la tiroides. Conozca otros medicamentos muy utilizados para tratar el exceso de peso como la Sibutramina o el Xenical, por ejemplo.