La semaglutida es un medicamento antidiabético indicado para el tratamiento de la diabetes tipo 2, ya que estimula la producción de insulina y reduce la de glucagón, lo que ayuda a disminuir los niveles de glucosa en sangre, junto con una dieta saludable y ejercicio regular.
Asimismo, este medicamento también está indicado para personas con obesidad o sobrepeso, ya que favorece la saciedad y reduce el apetito durante el día, lo que facilita la pérdida de peso al disminuir las calorías consumidas.
La semaglutida está disponible en farmacias bajo los nombres comerciales Ozempic, Wegovy o Rybelsus, en presentaciones inyectables o en forma de comprimidos. Su venta requiere receta médica, y debe ser utilizada bajo la supervisión de un endocrinólogo.
Para qué sirve
La semaglutida sirve para el tratamiento de:
- Diabetes mellitus tipo 2 descontrolada, cuando la dieta, ejercicio y/u otros antidiabéticos no han tenido éxito para controlar los niveles de azúcar en la sangre;
- Obesidad con IMC igual o superior a 30 kg/m2;
- Exceso de peso con IMC superior a 27 kg/m2 que presenten enfermedades asociadas, como hipertensión, diabetes mellitus, dislipidemia o colesterol alto;
- Obesidad infantil, pudiendo ser usado en adolescentes con más de 12 años, con peso corporal mayor a 60 Kg. Además, debe ser usada en conjunto con una dieta baja en calorías y con la realización de actividad física de forma regular.
Este medicamento es una hormona sintética, semejante al glucagón, producido de forma natural por el cuerpo, lo que estimula la producción de insulina en el cuerpo, facilitando el control de los niveles de azúcar en la sangre cuando se asocia a una dieta balanceada y a la práctica de ejercicio regular.
La semaglutida, para el tratamiento de la diabetes, se puede usar sola o junto con otros medicamentos antidiabéticos, como la metformina, por ejemplo, siempre bajo indicación del endocrinólogo.
Semaglutida para adelgazar
La semaglutida actúa estimulando la producción de insulina en el páncreas, lo que permite reducir los niveles de azúcar en la sangre, además de actuar en áreas del cerebro responsables de la regulación del apetito y saciedad, haciendo que haya una reducción de la cantidad de calorías ingeridas diariamente, por lo que este medicamento también ayuda a bajar de peso en los casos de obesidad y sobrepeso.
Además, en personas con sobrepeso u obesidad y que tienen diabetes, los niveles de azúcar en la sangre se regulan mejor, haciendo que el azúcar sea utilizada con mayor facilidad por las células, terminando por depositarse menos en forma de grasa.
Para el tratamiento de la obesidad o exceso de peso, la semaglutida debe ser usada solo bajo indicación médica, y debe formar parte de una dieta balanceada orientada por un nutricionista y la práctica de ejercicio regular. Vea cómo hacer una dieta balanceada para perder peso.
Lea también: Mounjaro: para qué sirve, cómo usarlo y efectos secundarios tuasaude.com/es/mounjaroCómo tomar
La semaglutida puede ser utilizada en forma de comprimidos o pluma inyectable, como se indica a continuación:
1. Semaglutida en pastillas (Rybelsus)
La semaglutida en comprimidos, conocida como Rybelsus, puede ser encontrarse en dosis de 3, 7 o 14mg, y puede usarse sola o junto con otros medicamentos para controlar la diabetes, de acuerdo a la orientación del médico.
Los comprimidos deben ser ingeridos enteros, con 1 vaso de agua, en ayuno, de preferencia antes del desayuno, debiendo esperar por lo menos 30 minutos antes de la primera comida del día o de tomar otros medicamentos.
La dosis inicial normalmente indicada para adultos es de 1 comprimido de 3 mg de semaglutida al día, por 30 días seguidos. Después del primer mes, la dosis del medicamento puede ser aumentada por el médico a 1 comprimido de 7 mg al día. En caso de que sea necesario, después de los 30 días, el médico podrá indicar la ingesta de 1 comprimido de 14 mg del medicamento por día.
La dosis máxima diaria de semaglutida no debe pasar los 14mg y debe tomarse bajo orientación médica.
2. Semaglutida en pluma inyectable (Ozempic)
La semaglutida en forma de pluma inyectable, conocida como Ozempic, debe ser aplicada bajo la piel en la zona del abdomen, del muslo o en la parte superior del brazo. Vea cómo aplicar una inyección subcutánea correctamente.
La dosis inicial normalmente recomendada para adultos es de 1 inyección de 0,25 mg, 1 vez a la semana. Después de 4 semanas, la dosis generalmente es aumentada por el médico a 0,5 mg, 1 vez a la semana. En caso de que la glucemia no esté bien controlada, el médico podrá aumentar la dosis del medicamento a 1 mg, 1 vez a la semana.
Lea también: Ozempic: para qué sirve, cómo usar y efectos secundarios tuasaude.com/es/ozempic3. Semaglutida pluma inyectable (Wegovy)
La semaglutida en presentación de pluma inyectable, debe aplicarse en inyecciones debajo de la piel de la barriga, muslo o de la parte superior del brazo.
La dosis de semaglutida para el tratamiento en adultos con sobrepeso debe aplicarse 1 vez por semana, y se debe iniciar con dosis menores y aumentarse gradualmente cada mes por el endocrinólogo, de acuerdo al siguiente esquema:
Estas dosis deben ser aumentadas solo con orientación del endocrinólogo, de acuerdo a la respuesta al tratamiento y evaluación de los efectos secundarios.
En caso de no haberse alcanzado ese resultado, el médico deberá reevaluar el tratamiento con el Wegovy. Vea cómo usar el Wegovy de forma correcta.
Posibles efectos secundarios
Los efectos secundarios más comunes del uso de semaglutida son:
- Náuseas o vómitos;
- Dolor en el estómago;
- Acidez o mala digestión;
- Diarrea o estreñimiento;
- Exceso de gases intestinales;
- Eructos frecuentes;
- Pérdida del apetito;
- Dificultad para tragar;
- Hipoglucemia;
- Ansiedad o depresión;
- Dolor de cabeza;
- Mareos;
- Cansancio.
Es importante buscar atención médica de inmediato o acudir a la emergencia hospitalaria más cercana si se presentan síntomas, como disminución de la cantidad de orina, náuseas y vómitos intensos que no mejoran, dolor de estómago o vientre intenso, visión borrosa o borrosa, ronquera, falta de dificultad para respirar, latidos cardíacos acelerados, piel u ojos amarillentos, distensión abdominal, diarrea acuosa o con sangre.
Además, se debe avisar al médico si la persona presenta cambios de humor o de conducta, depresión, ansiedad, habla o piensa en hacerse daño o pensamientos suicidas.
La semaglutida también puede causar efectos menos comunes, como inflamación del páncreas (pancreatitis), cálculos biliares y cambios en el sabor de los alimentos y parálisis del estómago (gastroparesia).
En el caso de las inyecciones, pueden presentarse efectos secundarios como dolor, picazón, irritación, hematomas y hematomas cerca del lugar donde se aplicó la semaglutida.
Contraindicaciones
La semaglutida no debe ser utilizada por personas alérgicas a alguno de los componentes de la fórmula ni por personas con diabetes tipo 1 o cetoacidosis diabética.
Este medicamento tampoco debe ser utilizado por niños y adolescentes menores de 18 años y por mujeres embarazadas o en período de lactancia.
Además, las personas con problemas de riñón o páncreas, problemas estomacales, como hernia hiatal o reflujo gastroesofágico, o personas que estén usando otros medicamentos, deben informar a su médico acerca de estas condiciones antes de iniciar el uso de semaglutida.
Cuidados durante el tratamiento
Algunos cuidados importantes que se deben tener durante el tratamiento con la semaglutida son:
- No utilizar la semaglutida sin que haya sido indicado por el médico;
- Tomar o aplicar la semaglutida en los horarios correctos, conforme la indicación médica;
- No aumentar la dosis de la semaglutida por cuenta propia, pero solamente después de la evaluación e indicación médica;
- Informar al médico todos los medicamentos que utiliza, incluyendo vitaminas o suplementos alimentarios, pues la semaglutida puede interferir en la absorción de estos medicamentos;
- Hacer la dieta y los ejercicios físicos recomendados por el médico;
- Comer en pequeñas cantidades y en intervalos más cortos;
- Beber pelo menos 2 L de agua por día, para mantener el cuerpo hidratado, y evitar la deshidratación en el caso de diarrea o vómitos;
- Evitar alimentos muy calientes, debido a que el vapor del alimento puede causar náuseas y vómitos;
- Evitar consumir bebidas alcohólicas;
- Informar ao médico inmediatamente en caso quede embarazada durante el tratamiento.
Además, se debe realizar un seguimiento médico regular y comunicar al médico los efectos secundarios de la semaglutida, para que pueda reevaluar el tratamiento.