Dolor o puntadas en el útero: 7 causas y qué hacer

El dolor o puntadas en el útero puede presentarse durante el ciclo menstrual, en el que hay un aumento de la producción de prostaglandinas, que son las sustancias responsables del dolor y que favorecen la contracción uterina para que se libere el endometrio y baje la menstruación.

Sin embargo, cuando el dolor o puntadas en el útero se producen fuera del período menstrual y se acompaña de otros síntomas, como flujo constante, sangrado fuera de la menstruación, sensación de presión en el vientre, dolor durante las relaciones sexuales, aumento del abdomen y de las ganas de orinar; pueden indicar inflamación del útero, endometriosis, adenomiosis o pólipos uterinos, por ejemplo. 

Por este motivo, en caso de que el dolor en el útero sea constante, no mejore al cabo de unos días o se acompañe de otros síntomas, es importante consultar al ginecólogo para que se realicen exámenes que ayuden a identificar cuál es la posible causa y se indique el tratamiento adecuado. 

7 causas de dolor o puntadas en el útero

Las principales causas de dolor o puntadas en el útero son:

1. Menstruación

El dolor o puntadas en el útero son comunes durante la menstruación, ya que durante este período hay un aumento en la producción de prostaglandinas, que son sustancias capaces de promover la contracción uterina y llevando a la descamación de la pared del útero o endometrio, dando como resultado la menstruación.

Qué hacer: el dolor en el útero debido a la menstruación se considera una situación normal, sin que sea necesario realizar algún tipo de tratamiento. Sin embargo, en caso de que el dolor sea muy intenso y dificulte las actividades del día a día, es importante consultar al ginecólogo para que indique el mejor medicamento para aliviar el dolor.

2. Ovulación

La ovulación ocurre en el medio del ciclo menstrual y es más fácil de identificar en ciclos regulares, presentando síntomas como aumento de la temperatura corporal, incremento del flujo vaginal y dolor o puntadas en la zona baja del vientre al producirse la rotura del folículo ovárico.

Los síntomas de la ovulación pueden variar de una mujer a otra y, en algunos casos, pueden ser bastante leves, por lo que pueden pasar desapercibidos.

Qué hacer: en caso de que el dolor sea muy intenso durante esta fase, es importante consultar al ginecólogo para que pueda identificar si hay alguna otra causa que esté provocando el dolor o indique algún analgésico para aliviarlo.

3. Enfermedad Pélvica Inflamatoria (EPI)

La enfermedad pélvica inflamatoria (EPI), es una infección de los órganos reproductores femeninos superiores, que incluyen el cuello uterino, útero, las trompas de Falopio y los ovarios, causando síntomas como dolor leve a moderado en el útero, menstruación irregular y a veces flujo maloliente. Conozca más sobre los síntomas de EPI.

Qué hacer: el tratamiento para la EPI debe realizarse de acuerdo a la orientación del ginecólogo, siendo normalmente iniciado el uso de antibióticos de acuerdo al agente infeccioso responsable de la inflamación.

4. Endometriosis

La endometriosis es una situación en que hay un crecimiento anormal del tejido endometrial fuera del útero, causando dolor en el útero, principalmente durante el período menstrual, dolor durante las relaciones sexuales, aumento del flujo menstrual y dificultar para quedar embarazada. Conozca más sobre los síntomas de la endometriosis.

Qué hacer: es importante seguir las orientaciones del ginecólogo, el cual puede indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios para aliviar los síntomas, medicamentos hormonales o la realización de cirugía, en los casos más graves.

5. Adenomiosis

La adenomiosis es una alteración que se produce dentro de las paredes del útero, las cuales se tornan más gruesas, causando dolor, que suele ser más intenso durante la menstruación, hinchazón en la barriga, dolor durante la relación sexual y aumento del flujo menstrual, por ejemplo. 

Qué hacer: se recomienda consultar al ginecólogo para que se realice el diagnóstico y se inicie el tratamiento más adecuado, que puede ser con el uso de medicamentos para aliviar los síntomas o, en los casos más graves, cirugía para remover el útero. Vea más detalles del tratamiento para la adenomiosis.

6. Miomas uterinos

Los miomas uterinos son un tipo de tumor benigno que puede formarse en el tejido muscular uterino y, en la mayoría de los casos, no produce síntomas. Sin embargo, cuando los miomas son muy grandes o hay varios, es posible que haya dolor o puntadas en el útero, principalmente durante las relaciones sexuales, estreñimiento y ciclo menstrual más largo.

Qué hacer: el ginecólogo puede recomendar el uso de medicamentos antiinflamatorios, hormonales, suplemento de hierro o la realización de cirugía para remover los miomas.

7. Pólipos uterinos

Los pólipos uterinos son una alteración semejante a un quiste, que pueden surgir en la pared del útero, y que pueden causar dolor en algunas mujeres, además de menstruación irregular y sangrado vaginal abundante después de la relación sexual.

Qué hacer: en la mayoría de los casos no es necesario realizar tratamiento para los pólipos uterinos, siendo apenas necesario un acompañamiento regular con el ginecólogo. En algunos casos, puede ser necesario el uso de medicamentos o la realización de cirugía para retirar los pólipos. Conozca más sobre el tratamiento de los pólipos uterinos.

Exámenes indicados

Generalmente, para hacer el diagnóstico exacto de la enfermedad del útero de la mujer, el médico tiene que hacer exámenes para observar el útero, vagina y vulva y, los principales exámenes son:  

• Tacto vaginal: el médico introduce dos dedos con guantes en la vagina de la mujer y, al mismo tiempo, coloca otra mano sobre el abdomen para evaluar los órganos del sistema reproductor para el diagnóstico de endometriosis y de enfermedad inflamatoria pélvica.
• Prueba de Papanicolau: también conocido por citología vaginal, es un examen utilizado para detectar la presencia de cáncer uterino y para esto, es necesario colocar un espéculo en la vagina y raspar suavemente la superficie del cuello uterino para obtener células para ser analizadas;

• Ultrasonido transvaginal: es un examen que permite diagnosticar diferentes problemas en la región pélvica como quistes, infecciones, cáncer, entre otros, a través de las imágenes que emite;

• Examen especular: se hace la introducción de un espéculo en la vagina para evaluar la presencia de flujo o de hemorragias.

Además de estos exámenes, el médico podrá pedir una ecografía o una resonancia magnética, dependiendo de la descripción de los síntomas de la mujer y, en la mayoría de los casos, los exámenes invasivos solo son realizados a partir del inicio de la actividad sexual.