El síndrome de la banda iliotibial, también conocido como rodilla del corredor, se caracteriza por dolor en la parte lateral de la rodilla y es común que se presente en ciclistas o corredores de larga distancia, que pueden ser atletas o no.
Para curar este síndrome se recomienda consultar a un ortopedista o un fisioterapeuta, los cuales pueden indicar el uso de pomadas antiinflamatorias, técnicas de liberación miofascial y ejercicios de estiramiento.
Este dolor es causado por la fricción de un ligamento con el fémur, cerca de la rodilla, que termina generando una inflamación en esta zona. Una causa común es el hecho de que la persona practique atletismo en pistas circulares, siempre en el mismo sentido o en terreno en descenso, sobrecargando la parte lateral de la rodilla.
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Tratamiento para el Síndrome de la Banda Iliotibial
El primer punto para tratar el síndrome de la banda iliotibial es combatir la inflamación usando pomadas antiinflamatorias que pueden aplicarse en la zona adolorida 2 a 3 veces al día con un pequeño masaje hasta que el producto sea totalmente absorbido por la piel. Colocar compresas de hielo también ayuda a aliviar el dolor y a combatir la inflamación, pero éstas no deben tener contacto directo con la piel para que no haya el riesgo de quemadura y no deben usarse por más de 15 minutos a la vez.
También es importante realizar ejercicios de estiramiento con todo el músculo de la zona lateral de la cadera y del muslo, llamado tensor de la fascia lata, pero una técnica que es muy eficiente es hacer el desprendimiento del ligamento usando una bola de masaje que contiene pequeñas espinas, usando un rodillo de espuma rígida para frotar la zona o usar las puntas de los pulgares e indicadores para frotar el lugar dolorido.
1. Estiramiento para el músculo iliotibial:
Acostarse boca arriba y usar un cinturón o cinta para pasar por debajo del pie y elevar la pierna lo máximo que pueda hasta que sienta estirar toda la región posterior del muslo y luego inclinar la pierna hacia un lado, en dirección al centro del cuerpo, hasta sentir cómo se estira toda la región lateral de la pierna, donde hay dolor. Permanezca parado en esa posición durante 30 segundos a 1 minuto a la vez y repita el ejercicio por lo menos 3 antes y después de usar el rodillo.
En ese estiramiento es importante no retirar la cadera del suelo, si le resulta más fácil, puede doblar un poco la pierna opuesta para mantener la columna debidamente posicionada en el suelo.
2. Liberación miofascial com rodillo:
Acostarse de lado por encima del rodillo que muestra la imagen y deslizar el rodillo en el suelo, usando el peso del cuerpo para que frote toda la zona lateral durante 2 a 7 minutos. También puede frotar la región adolorida con una pelota de tenis o pelota de masaje en el suelo, usando el peso de su cuerpo.
3. KT Tape para diminuir la fricción:
Colocar una cinta tipo taping en toda la región lateral del muslo también es una buena forma de disminuir la fricción del tejido con el hueso. La cinta debe colocarse 1 dedo debajo de la línea de la rodilla y en toda la extensión del músculo y tendón iliotibial, pero para que tenga el efecto esperado, debe colocarse durante un estiramiento de ese músculo. Para ello la persona necesita cruzar la pierna e inclinar el tronco hacia adelante y hacia el lado opuesto al de la lesión, la longitud de esa cinta debe ser de unos 20 cm. Una segunda cinta puede aplicarse cortada por en medio para envolver la parte media del músculo iliotibial, más cercano a la cadera.
Cómo identificar la "rodilla del corredor"
El síndrome de la banda iliotibial tiene como síntoma el dolor a un lado de la rodilla que empeora al correr y subir o bajar escaleras. El dolor es más frecuente en la rodilla pero puede extenderse hasta la cadera, extendiéndose a la parte lateral del muslo.
El diagnóstico debe ser hecho por el médico, fisioterapeuta o entrenador y no requiere de exámenes de imagen como rayos X, ya que la lesión no presenta ninguna alteración ósea, pero para excluir otras hipótesis el médico podrá recomendar la realización de estas pruebas.
Prevenir el dolor a un costado de la rodilla
Una de las formas de tratar este síndrome es fortalecer los músculos de la cadera con ejercicios, ya que así la rodilla puede quedar más centralizada, disminuyendo el riesgo de esa fricción que da origen a la inflamación y por consecuencia al dolor. Los ejercicios de Pilates pueden ser muy útiles para estirar y fortalecer los músculos de las piernas y glúteos, realineando todo el cuerpo.
Para corregir la pisada durante la carrera es importante doblar ligeramente la rodilla mientras corre para amortiguar el impacto con el suelo, por lo que no es recomendable correr con la pierna siempre muy estirada, ya que aumenta el riesgo de fricción de la banda iliotibial.
En las personas que poseen la rodilla naturalmente orientadas hacia adentro o con pie plano también es importante corregir estos cambios a través de la fisioterapia con reeducación postural global para disminuir el riesgo de retorno de esta inflamación