El síndrome de la persona rígida es una enfermedad autoinmune que afecta la capacidad de relajación de los músculos, causando síntomas como rigidez, contracciones musculares repentinas en todo el cuerpo y espasmos provocados por el tacto o emociones intensas.

Este síndrome es causado por la producción de anticuerpos anormales por el cuerpo, que atacan el sistema nervioso, y es más común en personas con diabetes o enfermedad celíaca, y mayores de 30 años, por ejemplo.

En caso de sospechar de tener el síndrome de la persona rígida, es importante consultar a un neurólogo para que se realice una evaluación y se inicie el tratamiento adecuado, que puede incluir medicamentos como benzodiazepinas, relajantes musculares e inmunomoduladores.

Principales síntomas

Los principales síntomas del síndrome de la persona rígida son:

Rigidez al mover el tronco, brazos y piernas;
Posturas anormales tales como encorvarse sobre sí mismo;
Dificultad para caminar.;
Caídas frecuentes;
Contracciones musculares dolorosas y repentinas en todo el cuerpo;
Espasmos musculares provocados por el tacto, emociones intensas o estímulos visuales o auditivos;
Deformidades en las articulaciones y la columna.

Normalmente, los síntomas del síndrome de la persona rígida se desarrollan lentamente y pueden tardar algunos meses en notarse. Inicialmente, los músculos del tronco son los más afectados, y es común que la persona tenga dificultad para doblar y girar el tronco.

Además, los síntomas tienden a empeorar durante el día, con el esfuerzo, en momentos de estrés, debido al frío o infecciones, por ejemplo. Debido a los espasmos musculares que ocurren repentinamente, la persona también puede desarrollar ansiedad, depresión, miedo a salir a la calle o realizar tareas específicas.

Variantes del síndrome de persona rígida

Las variantes del síndrome de la persona rígida son más raras y pueden ocurrir cuando los síntomas afectan partes específicas del cuerpo, como solo brazos, piernas o cuello. Además, en algunas ocasiones también pueden estar presentes otros síntomas como debilidad, somnolencia y pérdida de coordinación motora.

Principales causas

El síndrome de la persona rígida normalmente es causada por la producción de anticuerpos anormales que atacan el sistema nervioso, lo que afecta la capacidad de relajación de los músculos. La causa de la producción de estos anticuerpos no siempre se identifica, pero en algunos casos puede ocurrir debido a un tumor, como cáncer de mama o colon.

Asimismo, el síndrome de la persona rígida es más común en personas mayores de 30 años, con predisposición genética y enfermedades autoinmunes, como diabetes tipo 1, enfermedad celíaca, anemia perniciosa y vitiligo, por ejemplo

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico del síndrome de la persona rígida generalmente lo realiza el neurólogo considerando los síntomas presentados, exámenes como la electromiografía y la medición de anticuerpos específicos en sangre llamados descarboxilasa de ácido glutámico (GAD), además de la respuesta al tratamiento con medicamentos benzodiazepínicos.

Otros exámenes, como resonancia magnética, medición de glucosa y hormonas tiroideas, también pueden ser indicados por el médico y normalmente son útiles para evaluar otras enfermedades posiblemente asociadas, como diabetes, hipotiroidismo y tumores.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento del síndrome de la persona rígida generalmente implica el uso de medicamentos como diazepam, baclofeno, pregabalina o levetiracetam, para aliviar síntomas como rigidez, espasmos musculares y dolor. Conozca más cómo es el tratamiento para aliviar los espasmos musculares.

Además, dependiendo de la respuesta al tratamiento inicial, la inyección de inmunoglobulina por vía intravenosa o inmunomoduladores, como rituximab o azatioprina, también pueden ser indicados, ya que actúan reduciendo la cantidad de anticuerpos anormales en el cuerpo. Algunas veces, los transplantes de células madre autólogas tratan de manera exitosa esta enfermedad.

Asimismo, la fisioterapia o terapia ocupacional, puede ayudar a retrasar la progresión del síndrome de persona rígida, siendo importante que sea realizada con el acompañamiento de un profesional especializado en esta enfermedad.

¿El síndrome de persona rígida tiene cura?

El síndrome de la persona rígida no tiene cura, sin embargo, los síntomas pueden ser controlados a través del tratamiento adecuado, especialmente cuando el síndrome se identifica tempranamente.