Tifus: qué es, síntomas y tratamiento

Qué es:

El tifus es una enfermedad causada por la picadura de una pulga o piojo infectado por la bacteria del género Rickettsia sp, que causa síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza constante y malestar general.

A medida que la bacteria se desarrolla dentro de las células, pueden incluso surgir manchas y erupciones en la piel que se diseminan rápidamente por el cuerpo.

Es importante que el tifus sea diagnosticado por el médico general o infectólogo lo antes posible para iniciar el tratamiento adecuado y evitar el surgimiento de complicaciones que pueden incluir alteraciones neuronales, gastrointestinales y renales.

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Síntomas del tifus

Los principales síntomas de tifus son:

  • Dolor de cabeza intenso y constante;
  • Fiebre alta y prolongada;
  • Cansancio excesivo;
  • Manchas y erupciones en la piel que se diseminan rápidamente en el cuerpo.

Estos síntomas surgen 7 a 14 días después de la picadura de una pulga o piojo y comienzan por ser poco específicos. Sin embargo, después de 4 a 6 días tienden a tornarse más intensos y afectar la piel.

Cómo se contagia

El contagio del tifus se produce cuando las heces infectadas por la bacteria del género Rickettsia sp. del piojo o de las pulgas son liberadas después de la picadura, haciendo que la bacteria logre entrar en el cuerpo humano.

De acuerdo a la especie y agente transmisor, el tifus puede clasificarse en:

  • Tifus epidémico, que es causado por la picadura de un piojo infectado por la bacteria Rickettsia prowazekii;
  • Tifus murino o endémico, causado por la entrada de las heces del piojo infectado por la bacteria Rickettsia typhi por medio de heridas en la piel o mucosas del ojo o de la boca.

Para prevenir el contagio, es importante garantizar buenas condiciones de higiene y sanitarias. Además, se aconseja el uso de repelentes y ropa holgada, principalmente en los lugares en que viven estos insectos con mayor frecuencia,

Diferencia entre Tifus, Fiebre tifoidea y Fiebre de las montañas rocosas

A pesar de que el nombre es semejante, tifus y fiebre tifoidea son enfermedades diferentes. El tifus es causada por la bacteria del género Rickettsia sp., mientras que la fiebre tifoidea es causada por la bacteria Salmonella typhi, que puede contagiarse a través del consumo de agua y alimentos contaminados. Conozca más sobre la fiebre tifoidea.

La fiebre de las montañas rocosas es una enfermedad causada por bacterias del mismo género del tifus, sin embargo, las especies y el agente transmisor son diferentes. La fiebre maculosa es causada por la mordida de la garrapata estrella infectada por la bacteria Rickettsia rickettsii. Vea cómo identificar la fiebre maculosa.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento para el tifus se realiza de acuerdo a la prescripción médica, siendo normalmente indicado el uso de antibióticos, como Doxiciclina, por ejemplo. La mayoría de las veces es posible notar mejoría de los síntomas en unos 2 a 3 días de iniciado el tratamiento; sin embargo, no se aconseja interrumpir el tratamiento, ya que es posible que la bacteria no haya sido erradicada del todo.

Otro antibiótico que puede utilizarse es el cloranfenicol, sin embargo, este medicamento no es la primera elección, pudiendo estar indicado en embarazadas, debiendo ser usado bajo estricto control médico.

Para evitar el contagio de tifus, se recomienda evitar lugares propensos al desarrollo de los piojos y pulgas, uso de insecticida para este tipo de insectos, tratar la ropa con calor, además del baño frecuente.

Posibles complicaciones del tifus

En caso de que el tifus sea identificado y tratado rápidamente, es posible que la bacteria infecte más células del cuerpo y se disemine hacia otros órganos, pudiendo causar problemas gastrointestinales, pérdida de la función renal y alteraciones respiratorias, pudiendo ser fatal principalmente en personas mayores de 50 años.