Trastorno alimentario compulsivo: qué es, síntomas y tratamiento

El trastorno alimentario compulsivo es un trastorno alimentario caracterizado por el deseo de comer en grandes cantidades y muy rápido, incluso cuando no se tiene hambre. Este trastorno generalmente resulta en un aumento de peso excesivo y el desarrollo de otros trastornos psicológicos, como depresión o bulimia.

El trastorno alimentario compulsivo puede ser desencadenado por crisis de ansiedad, problemas hormonales, dietas muy restrictivas o por grandes pérdidas emocionales, por ejemplo.

Este trastorno tiene cura, especialmente cuando se identifica y se trata desde el inicio. El tratamiento para la compulsión alimentaria implica sesiones de terapia y seguimiento nutricional, además de poder ser indicado por el médico el uso de medicamentos en algunos casos.

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Síntomas de trastorno alimentario compulsivo

Los principales síntomas de la compulsión alimentaria son:

  • Consumir grandes cantidades de comida, aunque no se tenga hambre;
  • Sentimiento de culpa después de comer;
  • Dificultad para dejar de comer;
  • Comer alimentos extraños como arroz crudo, un bote de mantequilla, frijoles fríos con queso, etc;
  • Comer muy rápido;
  • Comer a escondidas;
  • Placer inmenso al comer;
  • Poca preocupación por el exceso de peso;
  • Sobrepeso u obesidad, ya que se consumen más calorías de las que el cuerpo puede gastar.
  • Descontento con la imagen.

Es posible que la persona con trastorno alimentario compulsivo también tenga otras alteraciones psicológicas, como ansiedad, depresión o bulimia, por ejemplo.

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Además, debido a la alimentación descontrolada y poco saludable, es común que existan otros problemas de salud como problemas respiratorios, deficiencias nutricionales, alteraciones cardiovasculares y diabetes, por ejemplo.

Qué médico consultar

El médico más indicado para identificar y tratar la compulsión alimentaria es el endocrinólogo, que realizará una evaluación detallada para determinar si puede ser consecuencia de alguna alteración hormonal.

Sin embargo, es común que por ser un trastorno alimentario,  el tratamiento también incluya un equipo multidisciplinario con psicólogo, psiquiatra y nutricionista.

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Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento para el trastorno alimentario compulsivo debe iniciarse lo antes posible y es importante que la persona sepa que es necesario un tiempo para que comience a hacer efecto. Se recomienda que el tratamiento para la compulsión alimentaria se inicie con una consulta con un psicólogo, pues así es posible identificar qué llevó a la compulsión alimentaria y, de esa forma, trabajar este aspecto durante las sesiones de terapia.

Es a través de las sesiones de terapia que los síntomas de trastorno alimentario compulsivo pueden comenzar a disminuir, siendo importante el tratamiento complementario con medicamentos, que debe ser realizado bajo recomendación médica, y orientación nutricional.

Además, es importante que la persona sea acompañada por un nutricionista para recibir orientación sobre qué debe consumir, cantidades y momentos del día. La práctica de actividades físicas también es importante en el tratamiento de la compulsión alimentaria, pues de esta forma es posible aliviar la ansiedad, mejorar el humor y desviar la atención de la comida.

Medicamentos para el trastorno alimentario compulsivo

Los medicamentos para el trastorno alimentario compulsivo deben ser orientados por el médico, pudiendo recomendarse el uso de controladores del apetito, antidepresivos y/o controladores del sistema nervioso, como la sibutramina, fluoxetina y topiramato, por ejemplo. 

La dosis y el tipo de medicamento pueden variar de persona a persona de acuerdo con el peso, características de la compulsión alimentaria y edad de la persona. Además, el uso de medicamentos debe complementarse con sesiones de terapia, seguimiento nutricional y práctica de actividad física.