La trombosis cerebral es un tipo de accidente cerebrovascular (ACV) que ocurre cuando un coágulo de sangre obstruye una de las arterias del cerebro, lo que puede llevar a la muerte o generar consecuencias graves como dificultades del habla, ceguera o parálisis.
Los síntomas de la trombosis cerebral no son muy específicos, notándose principalmente un dolor de cabeza muy intenso. Esta situación le puede pasar a cualquiera, siendo más común en mujeres, debido al uso de anticonceptivos orales y al embarazo, y en personas que tienen antecedentes de enfermedades cardiovasculares.
Es importante que, ante la sospecha de trombosis cerebral, la persona acuda al hospital para realizar el diagnóstico, de manera que se inicie el tratamiento más adecuado, que consiste en el uso de medicación para aliviar los síntomas y disolver el coágulo.
Lea también: ACV: qué es, síntomas, tipos, causas y tratamiento tuasaude.com/es/accidente-cerebrovascularSíntomas de trombosis cerebral
Los síntomas de trombosis cerebral son:
- Dolor de cabeza intenso;
- Hormigueo o parálisis en un lado del cuerpo;
- Boca torcida;
- Dificultad para hablar y comprender;
- Cambios en la visión;
- Mareos y pérdida del equilibrio.
Los síntomas de la trombosis pueden ser inespecíficos, por lo que el diagnóstico puede ser más complicado. Sin embargo, ante la presencia de estos signos y síntomas, se recomienda llamar inmediatamente a una ambulancia, al número de emergencia de su país, o acudir inmediatamente al servicio de urgencias más cercano. Durante este tiempo, si la persona se desmaya y deja de respirar, se debe iniciar el RCP.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de trombosis cerebral lo realiza el médico general o neurólogo a través de la evaluación de los signos y síntomas que presenta la persona y los resultados de las pruebas de laboratorio y de imagen.
El médico suele recomendar la realización de hemograma completo, coagulograma y cuantificación de dímero D, además de indicar la realización de exámenes de imagen como una resonancia magnética, tomografía computarizada, angiografia, venografía y/o una ecografía para visualizar la presencia de trombo y/o alteraciones en el cerebro sugestivas de trombosis.
¿La trombosis cerebral tiene cura?
La trombosis cerebral tiene cura, especialmente cuando el tratamiento se inicia en la primera hora después del surgimiento de los síntomas, sin embargo, el riesgo de secuelas depende de la región afectada y del tamaño del coágulo.
Principales causas
La trombosis cerebral puede ocurrir en cualquier persona saludable, habiendo mayor riesgo de ocurrir en las siguientes situaciones:
- Presión arterial alta;
- Diabetes;
- Exceso de peso;
- Niveles elevados de colesterol en la sangre;
- Ingestión excesiva de bebidas alcohólicas;
- Problemas cardíacos, como cardiomiopatia o pericarditis;
- Uso de anticonceptivos orales;
- Embarazo;
- Trombofilias;
- Deshidratación;
- Uso de drogas de abuso;
- Realización de una punción lumbar o procedimientos neuroquirúrgicos.
Además, el riesgo de trombosis cerebral también es mayor en personas con diabetes no tratada, mujeres en posparto y antecedentes familiares de enfermedad cardíaca o ACV.
Tratamiento de la trombosis cerebral
El tratamiento para la trombosis cerebral debe iniciarse lo más rápido posible en el hospital, ya que es necesaria la aplicación de inyecciones de anticoagulantes, como la heparina, directamente por vía intravenosa, de manera que se disuelva el coágulo que está obstruyendo la arteria del cerebro.
Además, también podría indicar otros medicamentos como como trombolíticos, antibióticos (en los casos donde haya una infección), antiepilépticos (si se producen convulsiones) o acetazolamida para disminuir la presión intracraneal, por ejemplo.
En algunos casos, el médico podría indicar una cirugía para retirar el coágulo del cerebro, llamada trombectomía, de manera que se restaure el flujo de sangre a través del vaso sanguíneo afectado.
Después del tratamiento, se aconseja permanecer internado entre 4 a 7 días para que se esté bajo observación constante del estado de salud, ya que durante este período existe un mayor riesgo de sufrir una hemorragia interna o que se vuelva a producir una trombosis cerebral.
Principales secuelas
Dependiendo del tiempo que haya durado la trombosis cerebral, pueden surgir secuelas debido a lesiones producidas por la falta de oxígeno en la sangre. Las secuelas pueden incluir varios problemas, desde alteraciones en el habla hasta parálisis, y su gravedad depende del tiempo que el cerebro haya quedado sin oxígeno.
Para tratar las secuelas, el médico puede aconsejar consultas de fisioterapia o terapia del habla, por ejemplo, ya que ayudan a recuperar algunas de las capacidades que se perdieron. Vea una lista de las secuelas más comunes de la trombosis cerebral y cómo es su recuperación.