Qué es:
El tumor cerebral es el crecimiento de células anormales en el cerebro o en las membranas que revisten a la médula espinal y al cerebro, pudiendo ser benigno o maligno, es decir, cáncer. Normalmente, los primeros signos de alerta que pueden indicar un tumor en el cerebro son dolor de cabeza intenso, visión borrosa, parálisis, falta de equilibrio e incluso convulsiones, dependiendo de la localización, tamaño y tipo de tumor.
Las causas de surgimiento de tumor cerebral no están totalmente claras, pero se sabe que ocurre debido a mutaciones genéticas en el ADN de las células, haciendo que se multipliquen de forma desordenada. En estos casos se llaman tumores primarios del cerebro. Sin embargo, la principal causa de tumores en el cerebro son metástasis en otras partes del cuerpo, como por ejemplo, cáncer de pulmón, mama, riñones o melanoma.
El tratamiento de los tumores cerebrales es realizado siempre por un equipo multidisciplinario, que incluye un oncólogo, neurólogo, neurocirujano y radiooncólogo, que pueden indicar la cirugía para remoción del tumor, radioterapia, quimioterapia o terapia dirigida, por ejemplo. El tratamiento ideal depende del tipo de tumor, tamaño y localización.
Síntomas de tumor cerebral
Los principales síntomas que pueden indicar un tumor cerebral, son:
- Episodios de dolor de cabeza o alteraciones en el patrón del dolor de cabeza;
- Dolor de cabeza que parece empeorar gradualmente o ser más frecuente;
- Problemas de memoria;
- Dificultad para concentrarse;
- Cambios de humor y de comportamiento;
- Náuseas y vómitos sin motivo aparente;
- Visión borrosa y en túnel;
- Alteraciones en el equilibrio o en la coordinación motora;
- Confusión mental;
- Disminución de la audición o del olfato;
- Cansancio o somnolencia excesiva;
- Pérdida del apetito;
- Pérdida de peso sin motivo aparente;
- Debilidad en un lado del cuerpo;
- Convulsiones.
Dependiendo del tipo tumor, localización, tamaño y de su evolución, también pueden surgir síntomas como temblores, dificultad para mover una parte o un lado del cuerpo, dificultad para caminar, hablar o deglutir, dificultad para hablar o balbuceo, movimientos oculares anormales, pérdida de la audición o del olfato, por ejemplo. Vea otros síntomas de tumor cerebral.
Síntomas de metástasis cerebral
Los síntomas de metástasis cerebral son los mismos del tumor que se origina en el cerebro.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico del tumor cerebral es realizado por el neurólogo u oncólogo a través de la evaluación de los síntomas, así como de su inicio, antecedentes de salud y examen neurológico para evaluar el equilibrio, reflejos, fuerza, coordinación motora, visión y audición, por ejemplo.
Además, para confirmar el diagnóstico, el médico debe solicitar exámenes de imagen, como resonancia magnética del cerebro, tomografía computarizada o PET-TC, que permiten identificar la localización, tamaño y cantidad de tumores.
Otro examen que el médico puede solicitar es una biopsia de tumor cerebral, que puede hacerse durante el tratamiento quirúrgico para remover el tumor, para identificar el tipo de tumor y, de esta forma, definir el mejor tratamiento.
Tipos de tumor cerebral
Existen varios tipos de tumor en el cerebro, siendo clasificados de acuerdo a su origen y localización. Por ser una lista grande, se mencionan a continuación los tipos más comunes:
- Meningioma: se caracteriza por la presencia de tumor en las meninges, que son las membranas que recubren y protegen al cerebro y médula espinal, y generalmente es benigno, pero puede evolucionar a un tumor maligno;
- Glioblastoma: es un tipo de tumor cerebral que ataca a las células de la glía, que son responsables de ayudar en las funciones de las neuronas, y generalmente tienen un alto grado de malignidad;
- Astrocitoma: es un tipo de tumor primario que ataca a los astrocitos, que son un tipo de célula con forma de estrella, que tienen como función sostener y nutrir las neuronas. Su gravedad varía de acuerdo a su tamaño y características, así como el grado de malignidad;
- Meduloblastoma: es el tipo de tumor cerebral maligno más común en niños, que se desarrolla en el cerebelo, la cual es una estructura en el cerebro responsable del equilibrio y postura corporal, y normalmente tiende a responder bien al tratamiento;
- Adenoma de hipófisis: es un tipo de tumor benigno caracterizado por el surgimiento de la glándula hipófisis que se encuentra en el interior del cerebro, en la silla turca del hueso esfenoides, responsable de controlar la producción de hormonas, como la prolactina, cortisol y hormona del crecimiento, por ejemplo, causando efectos sobre todo el organismo;
- Neuroma acústico o schwannoma: es un tipo de tumor benigno, que surge en los nervios que van del oído al cerebro, controlando la audición y el equilibrio;
- Ependimoma: es un tipo de tumor de cerebral que se desarrolla a partir de las células ependimarias, que son responsables del revestimiento del tubo neural, es decir, al tejido que recubre el sistema nervioso.
Los tumores cerebrales pueden clasificarse como primarios, cuando las células anormales se originan del propio sistema nervioso; o secundario, que ocurre cuando las células anormales del tumor cerebral surgen a partir de otro órgano con cáncer, como el de pulmón, riñón, intestino, mama o melanoma, conocidos como metástasis.
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento para el tumor cerebral varía de acuerdo con el tamaño, el tipo, el grado del tumor y también depende de si el tumor se diseminó hacia otras partes del sistema nervioso central, pudiendo ser indicados varios tipos de tratamientos por parte del oncólogo, como las siguientes opciones:
1. Cirugía
La cirugía generalmente es la primera opción de tratamiento para el tumor cerebral, indicada para remover el tumor del cerebro y una parte del tejido alrededor del tumor, siendo en algunos casos el tratamiento curativo para tumores de bajo grado. Sin embargo, la realización de la cirugía depende del tipo de tumor, tamaño y localización.
Durante la cirugía, el médico realiza una biopsia cerebral, para que el tumor sea analizado en el laboratorio, lo cual permite identificar el tipo de tumor, y de esta forma, permitir que el oncólogo recomienda el tratamiento más adecuado.
2. Radioterapia
La radioterapia es usada para tratar el tumor cerebral por medio de la aplicación de radiación de alta energía de haz externo, directamente en la zona del tumor, llamada radioterapia convencional. El objetivo es destruir las células cancerígenas, y de esta forma, disminuir o interrumpir el crecimiento del tumor, o eliminar el tumor cerebral.
Este tipo de tratamiento, generalmente está indicado después de la cirugía para remover el tumor, pudiendo realizarse junto con la quimioterapia, que dependerá de cada caso.
En algunos casos, puede indicarse braquiterapia, que es un tipo de radioterapia hecha a través de un implante radioactivo, introducido en el cerebro que emite radiación de forma gradual. El tiempo de tratamiento es diferente para cada tipo de tumor y el médico radiooncólogo es quien indica las sesiones y la dosis de radiación.
3. Quimioterapia
La quimioterapia es un tipo de tratamiento que consiste en la aplicación de medicamentos por vía intravenosa a través de un catéter o con quimioterapéuticos forma de comprimidos, con el objetivo de destruir las células tumorales que están causando el tumor cerebral.
Los medicamentos más utilizados en la quimioterapia son la carmustina, temozolomida, lomustina, procarbazina, vincristina, etopósido, cisplatino, carboplatino o irinotecán, por ejemplo, que deben ser indicados por el oncólogo, de acuerdo a los protocolos de tratamiento para los diversos tipos de tumores cerebrales.
La quimioterapia actúa interfiriendo en la multiplicación de las células de cáncer, las cuales se dividen rápidamente, sin embargo, también puede afectar las células saludables causando efectos secundarios, como caída de cabello, cansancio, reducción de la inmunidad, anemia o diarrea, por ejemplo.
Las dosis de estos medicamentos quimioterapéuticos y la cantidad de sesiones indicadas serán establecidas por el oncólogo y, generalmente, las aplicaciones serán realizadas dentro de un intervalo para que las células saludables se recuperen.
4. Terapia dirigida
La terapia dirigida consiste en medicamentos que actúan directamente en genes de las células del tumor cerebral, evitando el crecimiento y ayudando a destruir este tipo de tumor.
Para que este tipo de terapia sea aplicada son necesarios exámenes y pruebas específicas para identificar estos genes y proteínas de las células tumorales, pues no todos los tipos de tumores tienen medicamentos de este tipo para realizar el tratamiento. El medicamento bevacizumab es un ejemplo de terapia dirigida usada en determinados tipos de tumores cerebrales, en la cual la dosis dependerá del tamaño y de la gravedad del tumor.
5. Terapia de soporte
La terapia de soporte se basa en el uso de medicamentos para aliviar los síntomas causados por el tumor cerebral, como por ejemplo los medicamentos corticoides, que ayudan a reducir la hinchazón cerebral, disminuyendo el dolor de cabeza y reduciendo las posibilidades de que la persona tenga una consecuencia gracias a esto, como el aumento de la presión intracraneal.
Los medicamentos anticonvulsivantes también pueden recomendarse para evitar que la persona con un tumor cerebral sufra de crisis convulsivas. Asimismo, pueden indicarse medicamentos analgésicos para aliviar el dolor y medicamentos para la ansiedad y la depresión, pues este tipo de tumor genera alteraciones emocionales.
¿El tumor cerebral tiene cura?
El tumor cerebral tiene cura dependiendo del tipo de tumor y de su agresividad, siendo que los tumores benignos tienen una posibilidad mayor de cura, ya que crecen más lentamente y normalmente no invaden otras partes del tejido cerebral.
En el caso de tumores malignos o cáncer, la cura dependerá de la agresividad del tumor, capacidad para diseminarse en el cerebro y de la respuesta al tratamiento.
Posibles secuelas
El tumor cerebral puede afectar estructuras importantes del sistema nervioso, pudiendo provocar alteraciones en la concentración, la memoria, el habla, la visión e incluso en los movimientos del cuerpo; por ende, estas alteraciones pueden generar secuelas como dificultad para comunicarse, problemas de visión y hemiplejia, que es cuando un lado del cuerpo permanece inmóvil, por ejemplo. Vea cuáles son los tipos de hemiplejia.
Además, el tratamiento para el tumor cerebral, principalmente la cirugía, puede causar efectos secundarios, como la limitación de los movimientos del cuerpo. No obstante, tan pronto como una persona sea diagnosticada con este tipo de tumor, será definido un equipo de profesionales multidisciplinario con la finalidad de encargarse de diversas situaciones, como el fisioterapeuta, que será responsable de mantener los movimientos, el fonoaudiólogo, que realizará terapias del lenguaje y el psicólogo, que acompañará las alteraciones emocionales del paciente y de la familia.